Autoridades texanas abren una investigación formal
El Gobierno de Texas anunció una investigación contra la plataforma Discord por supuestamente permitir la exposición de menores de edad a contenido extremista. El fiscal general Ken Paxton presentó una demanda investigativa civil para exigir documentos e información que permitan determinar la responsabilidad de la empresa en estos hechos.
De acuerdo con el comunicado oficial, la investigación busca esclarecer el papel de la plataforma en la radicalización, explotación sexual y adicción digital de jóvenes usuarios. Discord, popular entre la comunidad gamer, se ha convertido en un espacio donde miles de adolescentes interactúan diariamente, lo que ha despertado preocupación entre las autoridades estatales.
Además, la oficina del fiscal señaló que este proceso forma parte de una estrategia conjunta con la administración de Donald Trump, con el objetivo de erradicar el extremismo violento en todas sus formas. Las autoridades aseguran que el trabajo coordinado entre los niveles estatal y federal permitirá reforzar la vigilancia sobre las plataformas digitales que concentran comunidades juveniles.
Relación con un caso de radicalización juvenil
La decisión de abrir la investigación surgió tras conocerse información relacionada con la muerte de un activista de ultraderecha. Durante las pesquisas, las autoridades descubrieron que el presunto responsable, un joven de 22 años, utilizaba Discord para comunicarse con sus amigos y su pareja.
Este hallazgo llevó a los investigadores a analizar si el uso de la plataforma podría estar vinculado con la difusión de ideologías extremistas entre jóvenes. Según fuentes cercanas al caso, el acusado participaba en varios servidores donde se compartían mensajes de odio y propaganda radical. Aunque no se ha determinado un vínculo directo entre la empresa y los contenidos difundidos, las autoridades consideran necesario profundizar en el análisis.
Presión política sobre las plataformas digitales
El anuncio de Paxton ocurrió poco después de que un comité de la Cámara de Representantes de Estados Unidos citara a declarar al consejero delegado de Discord junto con los directores de otras redes sociales. Los legisladores los acusaron de permitir la radicalización de usuarios y de no actuar con suficiente rapidez ante la circulación de contenidos peligrosos.
Mientras tanto, Discord no ha emitido una respuesta oficial sobre la demanda de Texas. Sin embargo, en anteriores ocasiones la compañía ha declarado que mantiene políticas estrictas contra el discurso de odio y la incitación a la violencia.
La investigación texana se suma a una serie de presiones políticas que enfrentan las plataformas digitales en Estados Unidos, donde el debate sobre la seguridad de los menores en línea y la responsabilidad tecnológica continúa ganando fuerza.

