MANTENGA LA CALMA

El pánico se apodera de las personas cada vez que la expresión “mantenga la calma” se manifiesta, sin embargo la única manera de ser asertivos en política es responder a cualquier situación con inteligencia emocional.

Todos los políticos, absolutamente todos. culpables o no de algún señalamiento, han de pasar por situaciones de descrédito, desprestigio, infamia o ignominia, ¿cómo afrontan por lo general las crisis?

Hay quienes aseguran que la mayoría no soportan acusaciones, están desconectados de las necesidades reales de la gente y las aseveraciones sobre sus familias o según las cuales son corruptos que buscan su propio beneficio, les perturban.

Afrontar críticas puede ser un desafío, ocultarse puede ser tan grave como la altivez desmedida, luego que mejor que mantener la transparencia, la honestidad y la autenticidad en todas las acciones: escuchar, comunicar de manera clara, reconocer errores y trabajar en ser directos con cada mensaje.

¿Lo hacen?… parece que no, en la mayoría de los casos les falta calma durante la turbulencia, se dejan dominar por el miedo y la ansiedad pues muchas veces no están familiarizados con los movimientos naturales de la crisis, por lo general no están dispuestos a seguir indicaciones, se las saben todas y ahí es donde resultan proclives a agrandar problemas.

Lo dicho, cuando una persona se encuentra en una situación adversa, ya sea por motivos políticos u otros, debe respetar su compromiso democrático de recuperar la confianza y el respeto, para esto puede buscar el apoyo de amigos, familiares o colegas, recibir orientación emocional, demostrar con hechos que el cambio positivo puede ayudar a restaurar la reputación, pero ahondar en vanas disputas, habrá de corroer el interior de cualquier estructura.

“En tiempos de crisis conservar la sonrisa es un acto revolucionario”, el inteligente encuentra soluciones y el inútil busca culpables.

Por FREDDY SERRANO DÍAZ

Estratega Político