A pesar de que aún no existe el antídoto universal y efectivo que logre curar la resaca después del consumo del alcohol, hay ciertos remedios que pueden ayudarte a poder sobrellevarla y hacer que te sea menos pesada la penitencia post festejo.
Y es que lo tormentoso que llegan a ser los padecimientos de una resaca o cruda, puede tumbar a cualquier guerrero fiestero. Desde fatiga, náuseas y dolores musculares, la resaca es algo que a nadie le gusta padecer.
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Es por ello que te damos algunos consejos que puedes seguir para poder hacer más ligeras las repercusiones de esas copitas de más que te tomaste en la cena de Fin de Año.
- Medicamentos que tienes en casa
Aunque no hay un medicamento como tal que sus especificaciones sean para combatir la resaca, hay algunos fármacos que te pueden ayudar para aminorar los síntomas, tales como la aspirina y otros inflamatorios como el ibuprofeno y naproxeno.
Estos medicamentos pueden reducir la inflamación en el cuerpo que ocasiona el alcohol para aliviar los dolores de cabeza y musculares.
Claro que éstos deben ser utilizados en dosis mínimas, para evitar irritar el estómago, ya que el uso excesivo de éstos puede ocasionar úlceras. Recuerda que siempre es recomendable consumir algún alimento antes de tomar algún medicamento, por lo que en este caso no es la excepción.
Otro medicamento que puede auxiliarte son los antiácidos, ya que neutralizan el ácido en el estómago y te puede ayudar a reducir las náuseas, acidez e indigestión que ocasiona el alcohol.
- Hidratación
El exceso de alcohol genera un proceso de deshidratación en el organismo, sobre todo en el cerebro. Por eso, es esencial el consumo de agua antes, durante y luego de ingerir bebidas alcohólicas para contrarrestar el efecto.
A esto, podemos agregarle el consumo de bebidas isotónicas que ayuda al cuerpo a recuperar los minerales perdidos, un buen descanso y alimentos con vitamina C que tienen propiedades antioxidantes perfectas para el proceso de desintoxicación, así como los electrolitos que son fáciles de conseguir en tiendas y farmacias.
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Desayunar
Las bebidas embriagantes bajan los niveles de azúcar en el organismo, es por ello que consumir alimentos a la mañana siguiente ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre para aliviar un poco las molestias que pueden presentarse.
Y es que cuando el cuerpo descompone el alcohol, aumentan los niveles de ácido láctico. Esto ocasiona una caída en los niveles de azúcar, lo cual puede contribuir a una resaca.
El cuerpo de una persona también necesita alimentos nutritivos que incluyen proteína, carbohidratos, grasas saludables y vitaminas para reparar y recuperarse.
Aunque científicamente no está comprobado, se tiene la creencia que en consumo de alimentos con altos niveles de carbohidratos son particularmente efectivos para “absorber” el alcohol, aunque la ciencia no lo ha indicado.
De igual forma, los alimentos ricos en antioxidantes ayudan a contrarrestar los malestares, te decimos en qué productos puedes encontrarlos en las cerezas, las uvas, granada, zanahoria, espinaca, jengibre, chocolate amargo, nueces y semillas, tés verdes y negros.
Y claro, los caldos para reponerse en el día después de la fiesta, son infalibles para darle un aliciente a tu estómago, así que no dudes en consumirlo.
- Tomar café o té
El café y otras bebidas con cafeína actúan como estimulantes, que pueden mejorar la sensación de fatiga que acompaña a la resaca.
El café, el té negro y el té verde contienen algunos antioxidantes que pueden reducir los efectos adversos del consumo de alcohol.
Sin embargo, éstos deben consumirse con moderación, debido a que las bebidas que contienen cafeína son diuréticos, que pueden empeorar los efectos de deshidratación en el cuerpo, así que no abuses de ellas, con una taza bastará.
De igual forma, el te de manzanilla es uno de los más famosos para aminorar los males, ya que calma la ansiedad y puede auxiliarte en los dolores estomacales.
- Dormir
El alcohol puede causar trastornos del sueño y puede estar asociado con una disminución en la calidad y duración del sueño para algunas personas.
Aunque las cantidades bajas o moderadas de alcohol inicialmente pueden favorecer el sueño, los estudios muestran que las cantidades más altas y el uso crónico pueden alterar los patrones de sueño.
Aunque la falta de sueño no causa una resaca, puede hacer que tu resaca sea peor. La fatiga e irritabilidad son síntomas de resaca que pueden empeorar por la falta de sueño.
