- Se confirma el registro de 417 cabilderos en la Cámara de Diputados al inicio de la 65 Legislatura.
Dicho registro se realiza en medio de señalamientos de corrupción, ya que han sido puente de negociación entre el sector privado y la sociedad civil con los legisladores, a fin de gestionar recursos, impulsar leyes o detenerlas en favor de sus intereses.
Medel (Morena), exdiputada federal Carmen, fue presidenta de la Comisión de Salud, y reconoció que la compra de voluntades a través del cabildeo persiste en San Lázaro y denunció que la quisieron sobornar.
Entre las empresas cuyos representantes se dieron de alta en la pasada Legislatura en el padrón de cabilderas y cabilderos del recinto legislativo y que debe actualizarse con la llegada del nuevo pleno destacan algunas que tienen que ver con el sector automotriz, la industria farmacéutica, las telecomunicaciones, los electrodomésticos o plataformas digitales, así como cámaras de comercio, industriales y productores. Se trata de 238 cabilderos particulares y 179 representantes de personas morales.
“Lo que hacemos los cabilderos es recopilar, analizar y clasificar la información legislativa para alertar a las empresas o inversionistas que nos contratan sobre leyes que pueden beneficiarlos o afectarlos, para que puedan tomar decisiones oportunas y acertadas.
Asimismo detalló: “A partir de esos datos también diseñamos estrategias de cabildeo y hacemos las gestiones necesarias con los diputados para que las leyes salgan lo más convenientes posibles para nuestros jefes”,
Desde 2013, luego de diversos escándalos en los que se documentó que empresas tabacaleras buscaron sobornar a legisladores para frenar un incremento de 20% al precio de la cajetilla de cigarros, invitándolos a viajes por Europa (2005), y que empresas privadas ofrecían un millón de dólares a cada legislador que lograra “tirar” o “modificar” artículos de una reforma fiscal del presidente Enrique Peña Nieto (2013), se cambió el reglamento interno de San Lázaro para restringir la labor de los cabilderos y prohibir que los legisladores