La migración es un fenómeno social inserto en las civilizaciones humanas a lo largo de la historia pues desde que el hombre se volvió sedentario y estableció sus primeros asentamientos, paralelamente comenzó la migración; incluso cuando aún no se establecían límites territoriales de las culturas o naciones; podemos decir que forma parte de la naturaleza del hombre, sin embargo, el común denominador es la búsqueda de mejorar la calidad de vida.
En ese sentido, debemos aclarar que el factor desencadenante es diverso, es decir, la razón por la cual el individuo no está conforme con su modo de vida, por lo que se deben de tomar en cuenta desde factores no tan comunes como el desarrollo y las comodidades, factores necesarios como la salud física o mental, hasta razones obligatorias como la economía y la seguridad.
Contextualmente en nuestro país este fenómeno ha sido recurrente incluso en el ámbito interno donde las grandes urbes, sobre todo en el centro del país, son poseedoras de una rica diversidad cultural, en gran medida provocada por la inmigración deveniente de los suburbios y estados vecinos, generalmente originada por la búsqueda de mejores oportunidades de trabajo.
Sin embargo, en el ámbito internacional la migración en México es un evidente indicador de la crisis económica que vive el país, que tienen como agravante la desproporcional distribución de la riqueza y la falta de empleo; pero también una consecuencia del grave problema de inseguridad generada en su mayoría por la delincuencia organizada, que ha provocado no solo el desplazamiento de connacionales hacia el país vecino del norte, sino, incluso el abandono de los habitantes de poblaciones enteras.
En primer término, se encuentra la situación de que las escasas oportunidades laborales cuentan con salarios insuficientes para subsistir, extendiéndose incluso a las personas con preparación académica, provocando la llamada fugas de cerebros; por otra parte están los altos niveles de inseguridad donde la población se ve obligada a emigrar dejando incluso su patrimonio y exponiendo a graves peligros a todos los integrantes de cada familia.
Pero que tan grave es el problema?, de acuerdo con los informe oficiales del Instituto Nacional de Migración (INAMI), el pasado mes de mazo presento su máximo nivel registrado, pues la patrulla fronteriza de los Estados Unidos realizo 87,388 detenciones, evidenciando el incremento exponencial del fenómeno migratorio, corroborándose al comparar la cantidad de compatriotas que fueron detenidos en el primer trimestre de este año respecto el mismo periodo del año anterior, tan solo en 2022 se registraron 219,413 encarcelamientos, y 147,554 en 2021, representando un aumento del 48.70%.
La situación es sumamente preocupante y más cuando tiene que ver con los desplazamientos obligados, máxime que el flujo de menores de edad y sobre todo niños esta al alza; pasando de ser una problemática grave a una que requiere inmediata atención; obligando al gobierno a replantear su estrategia en ambos flancos, primeramente en el cumplimiento a cabalidad de una de sus principales obligaciones, que es la de garantizar la seguridad nacional y la otra intensificar la creación de empleos, que no sólo exigen cantidad, sino formalidad y salarios dignos.