11 aniversario

Mark Carney admite tensiones entre Canadá y EE. UU.

Mark Carney Canadá

Reunión en la Casa Blanca con tono cordial

El primer ministro de Canadá, Mark Carney, se reunió por segunda vez con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la Casa Blanca, durante un encuentro que combinó bromas y tensión diplomática. La cita tuvo lugar en el Despacho Oval y concluyó con un almuerzo privado, parte de los esfuerzos canadienses por reactivar las negociaciones comerciales con Washington.

Trump calificó a Carney como “un líder de talla mundial” y destacó su habilidad como negociador. En tono humorístico, el mandatario estadounidense mencionó una hipotética “fusión entre Canadá y Estados Unidos”, lo que generó risas entre los asistentes, aunque aclaró que solo se trataba de una broma.

Pese a la atmósfera relajada ante las cámaras, los gestos serios de los funcionarios canadienses revelaron que las conversaciones continúan marcadas por diferencias, especialmente en sectores como el automotriz y la agricultura. La delegación estadounidense, que incluyó al vicepresidente J. D. Vance, se mostró más distendida.

Negociaciones con avances limitados

Durante el encuentro, los mandatarios buscaron reducir tensiones comerciales generadas por los nuevos aranceles impuestos por Washington a productos canadienses. Aunque no se anunció ningún acuerdo concreto, Trump aseguró que Canadá “podría irse muy feliz” tras la reunión.

Por su parte, Carney subrayó que “somos más fuertes juntos” y reconoció la existencia de “conflictos naturales” entre ambos países debido a la competencia económica. El primer ministro insistió en la necesidad de mantener una relación basada en el respeto mutuo y la cooperación.

Mientras tanto, el líder conservador Pierre Poilievre criticó la falta de resultados, acusando a Carney de “vender a los trabajadores canadienses por una comida”. Sus declaraciones reavivaron el debate interno sobre la estrategia comercial del gobierno canadiense frente a la administración estadounidense.

Futuro del CUSMA y posibles ajustes

Uno de los temas centrales fue la renovación del CUSMA, el tratado de libre comercio entre Canadá, Estados Unidos y México, cuya revisión está prevista para 2026. Trump adelantó que los aranceles no se eliminarán totalmente y dejó abierta la posibilidad de renegociar el acuerdo o firmar uno nuevo.

El presidente estadounidense señaló que su país busca impulsar la producción automotriz nacional, aunque expresó su deseo de que Canadá también mantenga un sector competitivo.

El ministro de Comercio canadiense, Dominic LeBlanc, quien acompañó a Carney, ofrecerá declaraciones en los próximos días para precisar si el encuentro dejó avances tangibles. Mientras tanto, ambos gobiernos mantienen la expectativa de que las conversaciones sirvan como base para un diálogo más fluido y constructivo en los próximos meses.