Día Internacional contra la Explotación Sexual Infantil: Un Llamado a la Conciencia

En el 4 de abril, conmemoramos el Día Internacional contra la Explotación Sexual Infantil. Esta fecha nos recuerda la urgente necesidad de proteger a los más vulnerables: niñas, niños y adolescentes que sufren abusos sexuales en todo el mundo.
La explotación sexual infantil es una flagrante violación de los Derechos Humanos. Ocurre cuando personas, movidas por su propio beneficio, involucran a menores en actos sexuales a cambio de dinero, regalos o protección. Es un fenómeno antiguo y extendido, arraigado en prácticas culturales y estructuras de poder que someten a las víctimas al dominio de los adultos.

Según la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI) realizada por el INEGI en 2019, aproximadamente 3.3 millones de niñas, niños y adolescentes están ocupados en formas de trabajo prohibidas, lo que representa el 11.5% de la población de 5 a 17 años. El trabajo peligroso al que se exponen incluye abusos físicos, psicológicos y sexuales.
La explotación sexual infantil es una herida profunda en nuestra sociedad. Los menores explotados son cosificados, reducidos a objetos de consumo. Como sociedad, debemos enfrentar esta injusticia y trabajar juntos para erradicarla.
En 1996, se celebró en Estocolmo, Suecia, el Primer Congreso Mundial contra la Explotación Sexual Comercial de Niños, Niñas y Adolescentes. Representantes gubernamentales y de la sociedad civil de 119 países se reunieron para abordar este problema y establecer acuerdos para combatirlo.

Hoy, en el Día Internacional contra la Explotación Sexual Infantil, recordemos que cada niño y niña merece crecer en un entorno seguro y protegido. Tomemos conciencia, eduquemos y denunciemos cualquier forma de explotación sexual. Juntos, podemos construir un mundo donde la infancia esté libre de abusos y violencia.