Rabbit R1: El dispositivo de inteligencia artificial que promete hacerlo todo por ti

Impulsado por un “modelo de acción grande”, el Rabbit R1 se agota en su tirada inicial de 10,000 unidades.

La startup de inteligencia artificial Rabbit ha lanzado su último dispositivo revolucionario, el Rabbit R1, un dispositivo independiente de inteligencia artificial (IA) que pretende cambiar la forma en que interactuamos con nuestras aplicaciones diarias. Jesse Lyu, CEO y fundador de Rabbit, asegura que el R1 no busca reemplazar los teléfonos inteligentes de inmediato, pero su ambición sugiere que podría ser inevitable en el futuro.

Características clave del Rabbit R1:

  • Precio: $199
  • Pantalla táctil de 2.88 pulgadas
  • Procesador MediaTek de 2.3 GHz
  • 4 GB de memoria y 128 GB de almacenamiento
  • Cámara giratoria para fotos y videos
  • Diseño en colaboración con Teenage Engineering
  • Sistema operativo propio, Rabbit OS, basado en un “modelo de acción grande”

Éxito de venta: La compañía anunció que la primera tirada de 10,000 unidades del Rabbit R1 se agotó rápidamente, y ahora están aceptando pedidos anticipados para un segundo envío en la primavera.

Experiencia práctica: A pesar de que solo un dispositivo funcional estuvo disponible en el evento de lanzamiento, los primeros encuentros con el Rabbit R1 fueron positivos. El dispositivo, del tamaño de la mitad de un iPhone, se distingue por su pantalla táctil, cámara giratoria y un botón de desplazamiento para interactuar con su asistente integrado. Aunque liviano y cómodo, es propenso a las huellas dactilares.

Rabbit OS y Modelo de Acción Grande: La verdadera joya del Rabbit R1 es su sistema operativo, Rabbit OS, basado en un “modelo de acción grande” (LAM). A diferencia de los asistentes virtuales tradicionales, Rabbit OS actúa como un controlador universal para aplicaciones, eliminando la necesidad de cambiar entre plataformas. La interfaz del R1 muestra tarjetas categorizadas para funciones como música, transporte y video chats, facilitando el acceso a través de comandos de voz.

Entrenamiento y Aprendizaje: El R1 cuenta con un modo de entrenamiento que permite a los usuarios enseñar al dispositivo cómo realizar tareas específicas. Jesse Lyu ejemplifica cómo se puede enseñar al dispositivo a editar imágenes con Photoshop, sugiriendo un potencial revolucionario para la manipulación de software mediante inteligencia artificial.

Desafíos y Perspectivas: Aunque la idea de Rabbit OS es inteligente al evitar la dependencia de desarrolladores para admitir el R1, la implementación práctica en diversos dispositivos y plataformas podría plantear desafíos. Sin embargo, la propuesta de Rabbit abre un nuevo camino en el panorama de hardware impulsado por inteligencia artificial.

Mientras el Rabbit R1 se posiciona como un dispositivo prometedor, el tiempo dirá si su ambiciosa visión de un controlador universal basado en inteligencia artificial puede cambiar la forma en que interactuamos con nuestras aplicaciones cotidianas. La agotada tirada inicial sugiere un interés considerable, pero su éxito a largo plazo dependerá de su capacidad para enfrentar desafíos prácticos en el mundo real.