Con una historia que data dese 1928, la Casa de la Cultura” Profesor Adrián Ortega Monroy”en Lerma, conserva un simbolismo de resiliencia y empoderamiento para la comunidad desde tiempos de la Revolución mexicana, la cual dejó devastadas a familias lermenses y que hoy por hoy es uno de los centros recreativos y educativos de mayor relevancia para el municipio, de acuerdo con datos del Ayuntamiento de Lerma.
Con fotografías que datan desde el año 1910 hasta 1940, se muestran las principales razones de su construcción, pues de acuerdo con el personal de la Casa, 57 años antes de ser un espacio cultural, era el único hospital de la ciudad, conocido por “El Hospitalito”, que no solamente se enfocaba a sanar a los enfermos, sino también era uno de los puntos principales de reunión para niños.
El Ayuntamiento aseguró, que la Casa de Cultura es de los pocos edificios céntricos que conservan el estilo neoclásico, dado que a pesar de su antigüedad, sus bases de construcción siguen siendo las mismas y con ello, se conserva la memoria histórico-cultural de la población.
Por lo anterior se decidió preservarlo a través de la creación de actividades culturales gratuitas como talleres de piano, danza, actividades de inglés, clases de primaria y secundaria, fotografía y repostería, enfocados al público en general.
Memoria colectiva de lermenses
De acuerdo con Lorena Gutiérrez de 49 años, habitante del sitio, asegura que el edificio es una representación simbólica de heroísmo en los habitantes, en tanto que antepasados dedicaban sus días al cuidado de los enfermos, particularmente en tiempos revolucionarios, tal como su abuelo, quien fue médico en el espacio y ayudó a la conservación del mismo.
“Como lermenses debemos de estar orgullosos de nuestro pasado y enseñarle eso a nuestros hijos. De ellos depende que este tipo de edificios se conserven y no se pierdan, solo por darle honores a personas que dedicaron su vida a cuidar a los demás”, mencionó.
El Ayuntamiento compartió, que la Casa tiene como principal finalidad rescatar la cultura municipal y fomentar a que futuras generaciones conserven la relevancia histórica del sitio.
