En el pasado Gran Premio de Bélgica se corrieron tres vueltas y solo dos fueron válidas antes las inclemencias presentadas en el circuito de Spa-Francorchamps.
Y ante las críticas recibidas, la Fórmula Uno dio a conocer sus razones para disputar esa pequeña parte de la competencia y no dar por cancelada la carrera, descartando que haya sido por un tema comercial por el dinero de las televisoras y los patrocinadores.
”No, no. Por eso, cuando escucho que alguien sugiere que había alguna discusión comercial detrás de eso, es totalmente falso, porque cuando hablamos de carreras, hay responsabilidad, es un proceso claro, y esas cosas no están conectadas en absoluto”, reveló Stefano Domenicali, CEO de F1 en comunicado.
”Por su puesto que es una pena para la gente, porque todo el mundo quiere ver una carrera normal, pero creo que las decisiones tomadas por Dirección de carrera fueron absolutamente correctas. Había el deseo y la voluntad de hacer la carrera. Y en cuanto hubo información, porque se estaba siguiendo la situación, surgió una ventana de posible mejora meteorológica para intentar salir y tratar de hacer la carrera. Luego, en cuanto se reanudó, los comentarios fueron bastante claros, y por otro lado se recibió otra previsión meteorológica según la que no era posible continuar”, se añadió.
Domenicali reveló cuál fue la razón para no suspender la carrera y disputarla un día después con mejores condiciones meteorológicas.
”No por logística, sino por muchas razones, no se puede programar la carrera el día después por muchos aspectos relacionados con la disponibilidad de los comisarios y la disponibilidad de otras cosas. Se estudió, por supuesto, pero no era posible. Los promotores siempre están muy cerca de cualquier decisión, siguieron el proceso, así que no les dejamos fuera de eso”, señaló.