Ante el despido del escritor e historiador Jorge F. Hernández como Agregado Cultural de la Embajada de México en España y como director del Instituto de Cultura de México en la misma legación, se dio inicio a un sin fin de comentarios en desacuerdo y así como, en apoyo al ensayista.
El debate se hizo presente en las redes sociales, cuestionando la decisión de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), y la posible causa. La cual se refiere a su artículo en el diario Milenio, en el que se posicionó a favor de la lectura en contraposición al pronunciamiento que hizo en días pasados Marx Arriaga, director de Materiales Educativos, durante la conferencia “Formación de docentes lectores en la escuela normal”, en la que dijo leer no debe ser un acto “individualista de goce” y que esto es un acto capitalista, lo que provocó innumerables críticas entre distintos escritores.
Hernández escribió en su artículo “Por placer”:
“Yo parto aquí una lanza a favor de quienes leemos por insomnio, para viajar sin maletas a cualquier paisaje y sin reloj a cualquier hora y época; hablo de los que leen en voz alta para compartir una trama y los que leen en silencio para hablar con dioses, ligarse a una musa o matar a un tirano… y hablo del que lee por pendejo porque no le queda de otra y el que lee las instrucciones para no dejarse engañar con un electrodoméstico y por supuesto por la niña que se talla los parpados en el instante luminoso de una línea donde un adolescente lee que es escrito como mago de maravillas en el libro que lee un anciano al que le leen en el asilo lo que una viejecita escribió en su juventud para dejar aclarado ya para siempre que en el fondo se lee por placer y diversos placeres se quedan en pura lectura así sigan babeando las recuas increíbles que advenedizos absolutamente ilegibles”.
Ante lo que se publicó un comunicado de la SRE por el Enrique Márquez, director de Diplomacia Cultural de México, donde se señaló que había cesado el contrato de Hernández “por comportamientos graves y poco dignos de una conducta institucional”.
“Reconozco que durante el tiempo transcurrido, su trabajo y sus aportaciones han sido muy importantes, como es de sobra conocido. Sin embargo, en fechas recientes, desafortunadamente, el señor Hernández incurrió en comportamientos graves y poco dignos de una conducta institucional que nos llevaron a solicitar a la secretaría el término de su contratación”.
Más tarde la cancillería subió a su sitio de internet una segunda versión del mismo comunicado en el que elimina la palabra graves y solo se señala que el cese se debió a “comportamientos poco dignos de una conducta institucional”.
Sin embargo, en ninguno de los dos documentos se precisa cuáles son esos comportamientos poco dignos del historiador.
Esto provocó una inmediata reacción en las redes sociales con publicaciones de los comentaristas atribuyendo a que el cese se debió a un acto de censura por el artículo, que aunque elegante en su escritura es contundente sobre el valor de leer y que se posiciona en contra de los dichos de Arriaga.
En los comentarios se alude a la esposa del presidente Andrés Manuel López Obrador, Beatriz Gutiérrez Müller, ser la protectora de Arriaga.
La noche del sábado, Jorge F. Hernández compartió el comunicado de su cese con el agradecimiento “al equipo del Instituto Cultural de México en España y la Biblioteca Octavio Paz”.
Ante la reacción en redes por el cese, el director ejecutivo de Diplomacia Cultural, Enrique Márquez emitió un nuevo comunicado, sin los logotipos de la SRE, en el que se lee que “por respeto a la opinión pública y dada la tergiversación que se ha generado, me veo obligado a precisar que de ninguna manera se trata de un acto de censura por los artículos y opiniones públicas recientes del Sr. Hernández. Se trata de un asunto ético y de conducta institucional”.
Señala que en días pasados, en una reunión en la ciudad de México, el escritor se refirió “en términos muy ofensivos y misóginos a quien era su jefa la señora embajadora de México en España, María del Carmen Oñate Laborde (sic) (su apellido es Oñate Muñoz). El propio sr Hernández, buscando mi apoyo, me refirió lo ocurrido en dicho evento. Esto está documentado”.
Asegura que por eso pidió a Recursos Humanos la terminación del contrato del escritor, porque “de ninguna manera estaría de acuerdo con conductas ajenas al debido respeto a las personas y a los códigos de ética institucional”.
Sin embargo, Jorge F. Hernández compartió el comunicado personal de Márquez, en un tuit en el que califica de “mentira” la explicación dada por el titular de Diplomacia Cultural. “Alcanza usted puras mentiras”, escribió en respuesta al comunicado.
Ante tal situación, Hernández ha sido respaldado con el apoyo de intelectuales como Consuelo Sáizar, ex titular del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), entre otros.