El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, anuncio a través de un video publicado este miércoles en su cuenta oficial de Facebook, la convocatoria de un referéndum sobre la ley contra la propaganda homosexual entre menores de edad, que incluye artículos duramente criticados por la Unión Europea (UE).
El jefe del Gobierno húngaro acusa a la UE de abusar de sus poderes para impugnar las recientes enmiendas a la ley húngara de protección de los menores de edad.
“En las últimas semanas, Bruselas ha lanzado ataques descarados contra Hungría por la ley de protección infantil. En Europa Occidental, los activistas LGBT visitan jardines de infancia, escuelas y realizan talleres de educación sexual. Y quieren hacer lo mismo en Hungría, por eso los burócratas de Bruselas nos amenazan e inician procedimientos por violación de derechos, abusando así de su poder. […] El futuro de nuestros hijos está en juego, por lo que no podemos ceder terreno en este asunto”, subraya Orbán.
Aunque el primer ministro no anunció la fecha de la celebración del referéndum, sí dijo que incluiría cinco cuestiones que los húngaros deberán responder si están a favor o en contra:
- La celebración de talleres de orientación sexual a menores de edad en los centros educativos públicos sin el consentimiento de los padres;
- La promoción de terapias de cambio de sexo en menores de edad;
- La posibilidad de acceder a estos tratamientos;
- La exposición, sin restricciones, de los menores a contenidos de los medios de comunicación de carácter sexual que pueden influir en su desarrollo;
- La exhibición de contenidos mediáticos sobre el cambio de sexo.
La ley, denominada oficialmente Ley de Protección de la Infancia, busca garantizar los derechos del niño a través de la prohibición de contenidos pornográficos y de aquellos que promuevan o impliquen “divergencia de la identidad propia correspondiente al sexo de nacimiento, el cambio de sexo o la homosexualidad”.
Su articulado ha generado fuertes críticas por parte de la comunidad LGBT y la UE, que la semana pasada emprendió acciones legales contra Hungría, a la que ha dado un plazo de dos meses para responder antes de llevar los casos al Tribunal de Justicia de la UE.