Hasta hace un par de años hablar del Cambio Climático se consideraba como una tendencia hippie, temas sin fundamento, relacionados con sucesos futuristas, sin embargo, los cambios en el clima y temperatura están sucediendo en un espacio de tiempo muy corto, fuera de toda proyección, cambios provocados por la huella humana, vinculados al aumento en la concentración de los Gases de Efecto Invernadero (GEI) como: el dióxido de carbono, el metano, el ozono, el hexafloruro de azufre y el óxido nitroso.
Para poder establecer estrategias que nos ayuden a resolver ciertas problemáticas es importante reconocer las causas y efectos; el 68% de las emisiones globales de GEI provienen de diez países, entre ellos México.
Desafortunadamente las alteraciones en los patrones de los eventos climatológicos y las temperaturas extremas serán cada vez más comunes y aumentarán si hay una mayor concentración de gases de efecto invernadero. Cambios que pondrán en riesgo la salud, la seguridad alimentaria y energética, así como el acceso al agua potable, entre otros –para conocer un poco más, consulta mi columna “El Cambio Climático y una Sociedad que No Cambia”–.
Los efectos del Cambio Climático son notorios, tal y como se aprecia en las olas de calor con temperaturas récord de casi 50 grados que han azotado a los Estados Unidos y Canadá, principalmente en la franja oeste del pacífico en ambos países, o las inundaciones ocurridas en Inglaterra, Bélgica, Alemania, Luxemburgo y los Países Bajos –aquí en México también hemos sufrido estos estragos–.
Olas de calor e inundaciones que han generado escenarios apocalípticos, y que han cobrado la vida de cientos de personas en ambos continentes, efectos climáticos que han encendido las alarmas ambientales de estos países, concluyendo que sin el Cambio Climático, esto habría sido prácticamente imposible ya que eventos similares ocurren una vez cada 1.000 años y que sería 150 veces menos probable si no existiera la influencia humana sobre el clima.
Las proyecciones de los modelos climáticos para los siguientes eventos futuros no son nada alentadores, tendremos una naturaleza extrema y en algunos casos podría ser peor de lo previsto. El incremento en la concentración de los gases de efecto invernadero seguirá afectando de manera alarmante a la temperatura, se prevé que para la última década del siglo XXI, la temperatura promedio mundial aumente entre 1.8 y 4°C, y de ser constante, podríamos tener las siguientes afectaciones: Las olas de calor serán más frecuentes e intensas; se presentaran mayores inundaciones y sequias en diversas regiones; se afectará notablemente el abasto de agua para uso humano, agrícola e industrial; se comprometerá la seguridad alimentaria; el deshielo de glaciares afectará el nivel, la temperatura y la composición del agua; mayor presencia de incendios forestales; se Impactará los ecosistemas naturales, por la invasión de especies desde otros ecosistemas; habrá millones de personas que vivirían en condiciones de estrés hídrico; la desertificación aumentará; un número importante de especies de flora y fauna silvestre se extinguirán y finalmente, los seres humanos.
Una de las mayores preocupaciones en torno al Cambio Climático es cómo se verá afectada nuestra vida cotidiana; imaginen los múltiples problemas sociales provocados por el desbasto de alimento y agua, además de la limitante en los servicios de salud, debido a la aparición de nuevas enfermedades.
México debe apostar en políticas y acciones responsables, invertir en energías renovables, promover innovaciones tecnológicas y actualizar las políticas públicas, donde se reduzca el uso de combustibles fósiles y se fomente el cambio hacia energías limpias. Transformar los sectores empresariales, con base en la eficiencia y buen uso de la energía. Eliminar la sobreexplotación de recursos naturales y su destrucción, con el fin de asegurar la resiliencia de los ecosistemas al Cambio Climático. Crear ciudades sostenibles, educando a la población en el manejo de los desechos generados y reciclaje de los mismos. Desarrollar campañas de concientización entre la población, mostrando la gran responsabilidad que tenemos como ciudadanos ante esta problemática global.
De no tomar las medidas adecuadas y urgentes para adaptarnos a la nueva realidad del Cambio Climático, enfrentaremos grandes pérdidas debido a los desastres. El momento de actuar es ya, de lo contrario, nuestro fracaso como especie está garantizada.