- El nivel socioeconómico, la escolaridad, el uso del biberón y el reingreso laboral de la madre frenan esta práctica.
Que los poderes públicos del Estado de México y los 125 ayuntamientos mexiquenses, en función de su capacidad presupuestal y en solidaridad con las madres trabajadoras, incrementen el número de lactarios o salas de lactancia en sus instalaciones, propuso la diputada Maribel Martínez Altamirano, en nombre del Grupo Parlamentario del PRI.
Al presentar un punto de acuerdo, al Pleno de la LX Legislatura mexiquense, la legisladora explicó que la bancada priista considera que se debe incluir a la lactancia como uno de los ejes para garantizar la salud y el desarrollo adecuado de las y los bebés durante los primeros mil días de vida.
“Esa alimentación tendrá un impacto directo en sus funciones motoras, cognitivas y emocionales a largo plazo”, subrayó la diputada e indicó que a la Legislatura le corresponde contribuir a la toma de decisiones benéficas para las madres trabajadoras, por lo que es necesario apoyar dicha práctica, la cual cuenta con el soporte de la Ley para la Protección, Apoyo y Promoción a la Lactancia Materna del Estado de México desde 2014, la cual señala la obligación de establecer lactarios en las instituciones públicas y privadas, aunque, dijo, en ese aspecto aún hay mucho por hacer.
La legisladora afirmó que cada vez es más común que ya no se ejerza la lactancia debido a factores relacionados con el nivel socioeconómico, la escolaridad, el uso paralelo de biberón, pero fundamentalmente, el reingreso laboral de la madre que le impide continuar con dicha práctica, por lo cual, las instituciones públicas y privadas mexiquenses, en atención a las disposiciones establecidas, deben garantizar las condiciones necesarias para que las madres cuenten con espacios adecuadas para poder alimentar a sus hijos.
La propuesta fue enviada a las comisiones de Legislación y Administración Municipal y a la de Trabajo, Previsión y Seguridad Social, para su estudio y dictamen.
