En sólo 16 meses (dic 2018 a marzo 2020) de gobierno la Transformación de 4ª (léase López Obrador) México ha perdido más de 9 millones 900 mil plazas laborales. Este alarmante número multiplíquelo por 6 (número de personas que forman una familia tipo), que ven dañada su calidad de vida por la equivocada y electorera austeridad republicana implementada por El Peje, al inicio de su fallido sexenio.
No son “mis datos” (como diría YSQ) si no del INEGI a través de sus Encuestas de Ocupación y Empleo. Estos son los datos duros, el Instituto explica que López Obrador heredó de Enrique Peña Nieto una Población Económicamente Activa (PEA) de 57 millones 400 trabajadores. De diciembre 2018 a marzo del 20, descendió (dejó de trabajar o se incorporó a la informalidad) a 47 millones 500 mil activos.
Esta vergüenza nacional, de quien tiene que velar, impulsar, facilitar (tramitología e incentivos) la creación de empleos a industriales, empresarios, comerciantes, emprendedores, micro, pequeños, medianos patrones, los tiene marginados, acosados (a través del SAT, de la UIF, de la Secretaría del Trabajo (caso NOTIMEX), de la Procuraduría de la Defensa del Trabajo, etc. abandonados, ignorados, al grado de verse obligados a cerrar fuentes de empleo por la ignominiosa actitud de quien, durante su campaña electoral 2018 juró, prometió, ofertó crear empleos y “primero los pobres”, a 1 año 11 meses de distancia, siguen siendo palabras huecas, mentirosas, engañosas.
Casi 10 millones de hombres y mujeres “echados a la calle” de su fuente laboral, habla de un gobierno indiferente, incapaz, engañabobos (chairos, amlovers, pejezombies, botts, etc.), insensato, corrupto, inútil. Para su patrocinador tiene un objetivo muy claro, que más adelante detallaré.
Y esto no es cosa menor o exclusivo de casa. Ya la Organización Internacional del Trabajo (OIT) advirtió, alertó al gobierno de López Obrador, que de continuar su política de austeridad en contra de la clase trabajadora, (no así a sus útiles electoreros, chairos, convenencieros empadronados en sus “programas sociales” eminentemente “cachavotos” y compra conciencias, a quienes regala dinero del erario público) a través de una nota técnica, que la tasa de desempleo en México se estacionará a finales de diciembre en 11.7 por ciento de la Población Económicamente Activa. Es decir, hablamos de casi 5 millones de mexicanos que se quedarían sin empleo, desplazados, “echados a la calle”.
Pero como López Obrador desde su púlpito mañanero en Palacio Nacional, desoye, desprecia, minimiza, ignora lo que le aconsejan o sugieren organismos internacionales y nacionales, hizo oídos sordos y arremetió contra trabajadores de los 109 Fondos y Fideicomisos públicos. Ordenó a la Cámara de Diputados (con todo y oposición) extinguir, desaparecer, aniquilar esas instituciones, corriendo a burócratas que administraban, operaban y a beneficiarios de los organismos.
Acusó “con sus datos” sin comprobar, ni justificar, que todo era corrupción, Sin embargo, la realidad de esta estúpida decisión, fue robar los 68 mil 400 millones de pesos anuales que tenían como presupuesto, dinero que sus gusanos en la cámara baja, arreglaron una enmienda constitucional para que López Obrador pueda “manejar”, “mover”, “jinetear” esos recursos a su libre albedrío. Podrá gastar ese dinero sin justificar ni comprobar ante autoridad hacendaria o fiscal. Por la libre.
No conforme con masacrar Fondos y Fideicomisos, echar a la calle a empleados y usufructuar más de 68 mil millones de pesos, ahora puso la mira en otro sector para desaparecerlo, según él, por corrupción y evasor de impuestos. De salirse con la suya aniquilará a 6 mil empresas privadas de outsourcing, tercerización o subcontratación, con ello López Obrador atentará contra el derecho laboral de más de 5 millones de personas que dependen del empleo que éstas les proporcionan.
Insisto, 5 millones de mexicanos que son jefes, jefas o responsables de familia, que afectaría, en promedio, a 30 millones de personas que dependen económicamente del sueldo que el outsourcing proporciona por subcontratación.
Como siempre, desde su atril mañanero, el señor López acusó sin pruebas, que estas empresas son corruptas y evasoras de impuestos. Según “sus datos” no pagan al fisco cada año más de 21 mil millones de pesos. ¿Y?, Andrés, ¿si aseguras son evasoras, por qué tu SAT, UIF, Hacienda, Función Pública, Secretaría del Trabajo no actúan en consecuencia y ordenan a la FGR perseguir, acosar, instigar a sus propietarios y someterlos al imperio de la ley?
Pero te vas por la fácil. Cerrar fuentes de empleo y “joder” a más de 5 millones de subempleados, que no son engañados, saben las reglas del juego y por necesidad las aceptan.
En vez de ser cruel y vil (que es tu personalidad) re ordénalas, vigílalas, somételas, pero no quites el pan de la boca y calidad de vida a más de 30 millones de personas que dependen de ese empleo temporal, subcontratado, ocasional.
Para demostrar tus incongruencias y mentiras, en la administración de la T4a, en el propio Palacio Nacional, se tienen contratados los servicios de varios outsourcing: como limpieza, mantenimiento, seguridad, sustento tecnológico, administración, suministros de papelería, alimentos, entregas, etc.
Las áreas de Administración y Servicios destinan millones de pesos a terceros para realizar labores que los empleados no deben hacer, por el tipo de trabajo que desempeñan.
Ejemplos: la dependencia estelar (que regala dinero público a los chairos, amlovers, botts, pejezombies, etc.) de la Transformación de 4ª, el Banco del Bienestar (creado para comprar conciencias, votos, lealtades ciegas, idolatría e intereses político/sociales) en 2019 pagó a 4 empresas de tercerización 408 millones de pesos y en lo que va de 2020 lleva gastados otros 463 millones. ¿Se es, o no se es, Andrés?
Pero la cosa no queda ahí. Una investigación de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, detectó que lejos de criticar estas contrataciones, el Gobierno de México la justifica y necesita, como lo consigna el mismísimo B del B que trabaja con la empresa KOM Business SA de CV, que en su programa de operación señala “se considera plenamente justificable la necesidad de llevar a cabo la contratación de los servicios técnicos y administrativos por outsourcing, ya que al no contar con dichos servicios el impacto negativo en lo social, económico y financiero sería muy alto”
Un dato adicional para desenmascarar al mentiroso. MCCI detalla que las Secretarías de Marina, Relaciones Exteriores, Bienestar, Hacienda, Economía, Sedena, Educación, así como Bancomext, Nacional Financiera, Banobras, INEA, etc. entre 2019 y 2020 tienen contratadas varias empresas terciarias por más de 5 mil millones de pesos. ¿Qué tal?
Vamos ahora a la realidad, lo que no acepta y encrespa al tabasqueño. Los guarismos de la Encuesta Telefónica de Ocupación y Empleo realizada en junio por el INEGI, señala que las personas en economía informal (que evaden impuestos y pagan por día a ayudantes sin prestaciones de ley en tianguis, mercados, puestos callejeros, taquerías, torterías. Servicios profesionales desde casa como contabilidad, finanzas, declaración de impuestos. Ventas por catálogo, por Internet, etc.) suman 25 millones 600 mil (53 %) de la PEA. A este sector el SAT no lo molesta, pero a los subcontratados, a los ex empleados de Fondos y Fideicomisos, los aniquiló la T4a.
La misma encuesta exhibe al gobierno fallido de López al señalar que el número de desplazados -con cálculos conservadores o “sus datos”- en 2020 asciende 31 millones 300 mil, pero recuerde, son cifras oficiales, por lo que hay que sumarle entre 45 y 50 por ciento que serían los números reales.
El IMSS en su reporte sobre el número de empleos formales registrados en su base de datos admite que de marzo a julio (en plena pandemia de COVID) se perdieron 1 millón 117 mil 584 plazas; es decir, más de 1 millón de jefes, jefas de familia, solteros, responsables de hogar quedaron al desamparo. Sólo sume las cifras que he consignado para evaluar la magnitud del caos laboral, sin que hasta la fecha la Transformación de 4ª haya hecho algo para paliar la desgracia.
Y todavía el insensato que cobra en Palacio Nacional sin dar resultados, el 3 de abril de 2020 en el mamotreto de su informe trimestral alharaqueó con esta promesa: “Vamos a crear en nueve meses 2 millones de nuevos empleos. En estos hechos y acciones, baso mi optimismo”.
A un mes de “cumplir” jajajajaja, su promesa, no sólo no ha creado plazas formales, sino ha perdido empleos y sumado desempleados a su nefasta gestión. ¿Alguien ahora puede creer en la palabra de un mentiroso?
Además del desempleo, otra asignatura pendiente de la T4a, que mantiene la recesión económica del país, detallada por el propio INEGI en su Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) muestra que en mayo el desplome en la economía fue de -21.6 por ciento respecto al mismo mes de 2019.
La verdadera intención de López al desaparecer instituciones no es combatir corrupción, sino asirse de dinero, de los presupuestos que deberían llegar a empleados y beneficiarios de programas públicos, para manipularlos como pago por compra de votos, de conciencias y tranzar rumbo a la elección intermedia de 2021 y la revocación de mandato en 2022.
Andrés Manuel no es demócrata, ni transparente, honesto, ni ético. Su visión es eternizarse en el poder al estilo Castro Ruz, Nicolas Maduro, Daniel Ortega e implementar la dictadura en México.
*Miembro de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión (ANPERT) y de Latitud Megalópolis (LM)