El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, aseguró, “El único proceso en el que yo estoy involucrado es en el de traer vacunas”, tras las declaraciones que Porfirio Muñoz Ledo, aspirante a la presidencia de Morena.
Muñoz Ledo había señalado a Ebrard de inmiscuirse en la elección interna del partido gobernante y de “estar ansioso, ganoso, desembocado por ser presidente de la República”. “Perdóname, Marcelo, pero te vas a ir del partido si sigues así”, espetó el veterano político.
Ebrard no ha titubeado en regresar los dardos que lanzó Muñoz Ledo y ha señalado que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, les exigió compromiso total con su proyecto de Gobierno para estar en el Gabinete desde que llegó al poder. “El que no tenga la convicción no debe de estar aquí, no es bienvenido. Y eso opera como una vacuna contra la mezquindad y la calumnia”, ha dicho el titular de Relaciones Exteriores durante la conferencia matutina de López Obrador, en la que informó de las gestiones del Gobierno para conseguir una vacuna contra la covid-19.
“No nos distraemos”, ha agregado. Las declaraciones de Muñoz Ledo a este periódico provocaron polémica, en medio de una elección interna que ha sacado a la luz las fisuras dentro del movimiento de López Obrador. El político de 87 años acusó al canciller de impulsar la candidatura de Mario Delgado, jefe de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados y ex Secretario de Finanzas en el Gobierno de Ebrard en Ciudad de México (2006-2012). Delgado encabeza varios sondeos, aunque las candidaturas de Muñoz Ledo, la exdirigente del partido Yeidckol Polevnsky y el politólogo Gibrán Ramírez también aparecen en el pelotón de punteros. La elección de Morena se decidirá en una encuesta que se realizará entre el 26 de septiembre y el 2 de octubre.
Muñoz Ledo acusó también a Ramírez, de 30 años, de atacarlo y de registrarse de último momento como militante para aspirar a la presidencia de Morena. “¿En qué lugar del mundo? ¿En qué lugar del universo? ¿En qué lugar de la galaxia central, perdóname, un joven se inscribe un día en el partido al que no pertenece y al día siguiente se lanza a la presidencia del partido sin saber nada? Lo compraron para que fregara”, aseguró Muñoz Ledo, que ocupa uno de los escaños del partido en la Cámara baja. “Al afirmar que me han comprado para detenerlo, Muñoz Ledo ignora que, a diferencia suya, no estoy ni estaré en venta para cambiar de proyecto político”, contestó Ramírez a su contrincante, que dirigió antes al Partido Revolucionario Institucional y al Partido de la Revolución Democrática, y enfatizó que lleva varios años como miembro de Morena.
En el cruce de acusaciones y ataques, Morena ha librado una batalla intestina que se ha prolongado durante más de un año y que en las próximas semanas llegará a su punto culminante. El partido de López Obrador se encamina a una votación interna que se perfila determinante para consolidar su proyecto político y en sus aspiraciones en la elección intermedia del próximo año, donde están en juego 15 gubernaturas estatales y la renovación de la Cámara baja.
Con información de El País