EL TURISMO, PASAPORTE A LA PAZ No. 1

Arquidiócesis de Toluca
Sacerdote Daniel Valdez García
Responsable de la pastoral del turismo

Dos años y medio de pandemia han dejado una estela de sufrimiento en la humanidad agravada con la guerra desatada por Rusia en Ucrania y los países involucrados, pero tampoco podemos cerrar los ojos a México ensangretado por el crímen organizado con cerca de 100 muertos por día, todo México es una “fosa clandestina”.

COMPARTIR MÁS QUE COMPETIR
María Montessori, una de las grandes pedagogas del siglo XIX, dijo: “Todo el mundo habla de paz, pero nadie educa para la paz; la gente educa para la competencia y este es el principio de cualquier guerra. Cuando eduquemos para cooperar y ser solidarios unos con otros, ese día estaremos educando para la paz”.

El turismo como gran fenómeno social facilita el encuentro entre los pueblos, las comunidades receptoras y las comunidades emisoras. El turista o viajero usa su tiempo libre para conocer, explorar y entrar en relación con la nación, cultura, pueblo o comunidad con la que interactúa facilitando la sinergia y la cultura del encuentro. Cuando unos a otros nos valoramos en esencia la dignidad de las personas nos edificamos mutuamente, de tal manera que los recursos naturales y culturales nos hacen capacez de abrirnos a la esperanza de ver hermanos y no adversarios; amigos y no enemigos; compañeros y no contrincantes. El turismo es un pasaporte a la paz ad intra y ad extra, nacional o internacional.