Entrada de dólares disminuye en abril pese a giro promedio alto
El flujo de remesas a México cayó 12.1% anual en abril, según datos publicados por el Banco de México. Las familias mexicanas que reciben apoyo económico del exterior obtuvieron 4,761 millones de dólares durante el mes, cifra que representa la mayor contracción anual desde 2022 para ese mismo periodo.
En contraste con abril, durante marzo de este año los envíos sumaron 5,141 millones de dólares, lo que entonces representó un crecimiento de 2.5% frente al mismo mes de 2024. La tendencia refleja una marcada volatilidad en los ingresos por remesas durante los últimos 18 meses, con ocho meses a la baja y otros con crecimientos intercalados, algunos incluso superiores al 8%.
Efectos del tipo de cambio y medidas regulatorias
Pese a la disminución anual, los hogares mexicanos que cambiaron estos ingresos a pesos experimentaron un aumento real de 5.5%. Este incremento se debe, en gran medida, a la depreciación del peso frente al dólar, que alcanzó el 16.7% en ese mismo periodo, así como al ajuste inflacionario.
Alberto Ramos, economista para América Latina en Goldman Sachs, señaló que el debilitamiento del envío de remesas podría estar vinculado al endurecimiento de políticas migratorias en Estados Unidos. Estas políticas habrían afectado la estabilidad laboral de los migrantes mexicanos, reduciendo su capacidad de enviar recursos a sus familias.
Jesús Cervantes González, director del Foro de Remesas del Cemla, advirtió que no se puede descartar un efecto combinado entre menor demanda laboral para migrantes y la ausencia de trabajadores indocumentados que evitaron presentarse a sus empleos por temor a ser deportados.
Menos transacciones, pero giros más altos
Durante abril, cada uno de los 11.1 millones de adultos beneficiarios recibió un giro promedio de 385 dólares, uno de los más altos del año. Sin embargo, el número total de transacciones cayó: se registraron 12.3 millones de operaciones, frente a las 13.4 millones contabilizadas en marzo.
En el acumulado de enero a abril de 2025, el valor total de los ingresos por remesas sumó 19,015 millones de dólares. Esta cifra representa una disminución de 2.5% respecto al mismo periodo de 2024, cuando ingresaron 19,501 millones de dólares.
De acuerdo con Ramos, la caída puede relacionarse también con las políticas estadounidenses para restringir el flujo de dinero ilegal, una medida que podría estar impactando indirectamente las remesas.
Perspectiva de corto plazo
La tendencia sugiere que los llamados “migradólares” atraviesan una etapa de incertidumbre, influida por factores económicos, migratorios y regulatorios. Mientras los montos individuales se mantienen altos, la reducción en el número de envíos refleja un contexto complejo para los trabajadores en el exterior y sus familias en México.
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