INFONAVIT, LA MANO QUE MECE LA CUNA

Por Adriana Delgado Ruiz | @AdriDelgado Ruiz

La cordura llegó de último minuto, pero a tiempo para detener el fiasco. La iniciativa de reforma al Infonavit que el Senado votó en fast track, subrepticiamente en la madrugada del sábado, no verá la misma prisa entre los diputados.

El Infonavit maneja 2.4 billones de pesos, cantidad tan enorme que significa el 8 por ciento del PIB, que es ahorro para la vivienda de millones de trabajadores a quienes no se les preguntó, ni a sus patrones quienes aportan mucho para ese ahorro como parte del salario integrado, si la institución puede crear una nueva constructora, además sin carácter de empresa pública pero sí en manos de Octavio Romero quien dejó las finanzas de Pemex hechas un galimatías.

¿Habrá transparencia? Sin una instancia autónoma como el INAI, se ve complejo. ¿La administración del Infonavit seguiría siendo tripartita? Sí, pero con un comité de vigilancia en que cinco integrantes representen al gobierno, sólo dos a los trabajadores y otros dos a los patrones. Ah, y con un comité de transparencia en el que tres de sus cinco miembros también sean del gobierno. ¿Desequilibrio suficiente? No. Si el consejo de administración no llega a acuerdos por unanimidad, el director general, Octavio Romero, tendría derecho de veto.

Políticos de oposición están llamando a los trabajadores a sacar sus recursos del Infonavit y hasta explican cómo. Lo siguiente será ver si las conversaciones entre las partes son reales y no un diálogo de sordos antes de que la Cámara de Diputados retome el dictamen. El objetivo que plantea la reforma no es malo, pero la forma da mucha desconfianza.

Hace apenas dos meses, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunció que durante su gobierno se construirán un millón de viviendas con precios de entre 700 mil y un millón 200 mil pesos, bastante accesibles particularmente para mujeres jefas de familia, jóvenes, indígenas y adultos mayores, además de regularizar un millón de hogares ya existentes.

Como plan es muy positivo considerando que, en realidad, el rezago en el país es de 10 millones de viviendas, de acuerdo con la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción. Actualmente hay 38 millones de hogares pero siete de cada 10 son informales, es decir, no tienen certeza en la propiedad y 8.9 millones de ellos están en situación de riesgo como barrancos, cerros y otros sitios demasiado expuestos a la furia de los elementos.

Hay millones de hogares en donde viven varias generaciones de una familia o incluso familias distintas. Un cálculo conservador es que en los próximos seis años el rezago aumentará en 6.5 millones de viviendas más.

Visto el panorama, es muy positivo que el gobierno tenga puesto El Dedo en la Llaga en un tema que requiere mucha atención. El punto es que no termine siendo una buena idea con una ejecución desastrosa.

MÁS LLAGAS

Lo dicho. Al igual que en múltiples desfalcos anteriores, ni la Comisión Nacional Bancaria y de Valores ni la Secretaría de Hacienda vieron a tiempo el presunto fraude por 81 mil millones de pesos que puso a la financiera Unifin en default desde 2022. El fundador, Rodrigo Lebois Mateos, no está enfrentado a la justicia sino sólo está dejando cobardemente que su hija cómplice, Almudena Lebois Ocejo, sea quien enfrente detención domiciliaria con un brazalete electrónico. Esta tarde será la audiencia en que se determine su vinculación a proceso. Se espera justicia.