La automotriz japonesa Honda ha emitido un llamado a revisión para aproximadamente 206 mil camionetas SUV en Estados Unidos debido a un defecto en el sistema de llenado de combustible. Este problema, detectado en modelos específicos de Honda Passport y Honda Pilot , podría ocasionar fugas de combustible en caso de accidente, lo que aumenta el riesgo de incendio.
Modelos afectados y origen del problema
La medida afecta a las camionetas Passport de los años modelo 2023 y 2024, así como a las Pilot fabricadas entre 2023 y 2025. De acuerdo con documentos publicados por la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés) , el defecto radica en una conexión incompleta entre el cuello de llenado y el tubo de llenado de combustible.
Honda explicó que esta anomalía se debe a un fallo en el proceso de instalación que ocurrió durante la fabricación, lo que podría provocar la separación de estas piezas en caso de impacto. Aunque no se han reportado incendios o lesiones relacionadas con el defecto, la empresa registró una reclamación de garantía sobre el problema.
Medidas correctivas
Los concesionarios de Honda han sido instruidos para inspeccionar los vehículos afectados y, en caso necesario, realizar las reparaciones necesarias para conectar adecuadamente el tubo del cuello de llenado al sistema de combustible. Esta inspección y reparación se ofrecerá sin costo alguno para los propietarios.
Los afectados recibirán notificaciones por carta a partir del 6 de enero de 2025, detallando los pasos a seguir para llevar sus vehículos a los talleres autorizados.
Histórico de seguridad y responsabilidad
Honda destacó que, desde diciembre de 2018 hasta noviembre de 2024, no se han registrado incidentes mayores asociados al defecto, lo que sugiere que se detectó de manera preventiva. El automóvil mantiene su compromiso de garantizar la seguridad de sus consumidores mediante este tipo de llamados a revisión que forman parte de sus estándares de calidad.
Contexto de los retiros de seguridad
El retiro de estas unidades se suma a otros casos recientes en la industria automotriz, donde las revisiones preventivas son esenciales para evitar problemas de mayor alcance. Este incidente resalta la importancia de los controles de calidad en el proceso de fabricación y la colaboración entre las marcas y las autoridades de seguridad vial.
