Ciudad de México, noviembre de 2024. El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que la tasa de desocupación (TD) en México alcanzó el 2.9 % de la Población Económicamente Activa (PEA) en septiembre de 2024, con una población desocupada de 1.8 millones de personas. Esta cifra representa un incremento de 38 mil personas en comparación con el mismo mes del año anterior, aunque la tasa de desocupación se mantuvo estable.
Población Económicamente Activa en aumento
El INEGI detalló en su Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) que la PEA fue de 61.2 millones de personas en septiembre de 2024, lo que equivale a una tasa de participación del 60 %. Este grupo registró un crecimiento de 374 mil personas respecto a septiembre de 2023. En paralelo, la Población No Económicamente Activa (PNEA) creció en 893 mil personas, sumando un total de 40.9 millones en el mes de referencia.
Subocupación y ocupación informal
De los 59.4 millones de personas que se encontraban ocupadas en septiembre de 2024, el 8.2 % —equivalente a 4.9 millones de individuos— se reportó como subocupado, es decir, con necesidad de laborar más horas. Esta cifra significó un aumento de 28 mil personas con respecto al mismo mes de 2023.
La informalidad laboral continúa siendo un desafío en el mercado laboral mexicano. El INEGI reveló que la población ocupada en este sector fue de 32.2 millones de personas, representando el 54.2 % de la población ocupada en septiembre de 2024, lo que reflejó una leve disminución de 0.1 puntos porcentuales en comparación con septiembre de 2023. En el conjunto de 32 ciudades del país, la tasa de informalidad se ubicó en un 42.1 %.
Dinámica de la informalidad
El reporte del INEGI enfatizó que el sector de la informalidad abarca a personas que laboran en micronegocios no registrados, en actividades de agricultura de subsistencia o sin seguridad social, además de aquellos vinculados a unidades económicas formales sin un reconocimiento adecuado de su relación laboral. La tasa de informalidad laboral se mantiene como uno de los principales indicadores de vulnerabilidad económica, especialmente para trabajadores sin contratos formales y prestaciones de ley.
Este análisis de la ENOE refleja las tendencias y desafíos en el mercado laboral mexicano, señalando un aumento en la población activa y en la ocupación informal, factores que demandan políticas para mejorar las condiciones laborales y reducir la precariedad en el empleo en el país.
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