La desaparición de Ryker Webb, un niño de tres años, mantuvo en vela a sus padres y autoridades estadounidenses durante varios días. Finalmente, el pequeño fue hallado con vida en un cobertizo en un bosque de alta densidad montañosa. A pesar de estar en buen estado físico y saludable, Ryker presentaba la conocida “mirada de las 1.000 yardas”, asociada a un evento traumático.
Las autoridades desplegaron un operativo de búsqueda, que incluyó equipos de perros, drones, buscadores terrestres y vehículos todo terreno. A pesar de las dificultades climáticas y la frondosidad del bosque, los rescatistas hallaron pistas que los condujeron a Ryker Webb. Una familia que vivía dentro del bosque se puso en contacto con las autoridades para informarles que habían encontrado a Ryker vivo.
La mirada de las 1.000 yardas es una expresión asociada al trastorno de estrés postraumático, que se caracteriza por una actitud inerte, perpleja y desenfocada. En el caso de Ryker, se desconoce el motivo de su desaparición y las circunstancias que llevaron al evento traumático que provocó su expresión de la mirada perdida.
Hermano de Ryker Webb habla acerca del suceso
Aunque el pequeño no dio muchos detalles sobre su experiencia en el bosque, su hermano mayor compartió un video en TikTok en el que Ryker afirmaba haberse encontrado con una casa donde “alguien” vivía. Descartando teorías conspiratorias, se desconoce el motivo del aviso tardío de la desaparición del niño por parte de sus padres y la falta de vigilancia mientras estaba jugando.
La historia de Ryker Webb ha dejado en evidencia la importancia de la atención y la vigilancia constante en entornos naturales con riesgos potenciales, así como la necesidad de la atención psicológica y médica adecuada para quienes hayan sufrido eventos traumáticos.
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