La ciencia nunca ha sido más clara, el momento de reducir las emisiones nunca ha sido más urgente, hay que centrarse en blindar el futuro, no en el ‘lavado verde‘”, asegura la directora de Greenpeace Internacional, Jennifer Morgan, para llamar la atención de los gobernantes previo a la presentación del informe del IPCC.
Así lo señala la activista en un comunicado de la organización ecologista antes de la presentación, el próximo 9 de agosto, del sexto informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas.
Según Morgan, los gobiernos y las empresas han “desperdiciado décadas preciosas con promesas vacías, ‘greenwashing’ e inacción” frente a los efectos del cambio climático.
“Las promesas de cero emisiones —que dependen en exceso de las compensaciones—, son una vieja idea fracasada que no tiene cabida en una emergencia planetaria y es la última artimaña de los que obstaculizan la lucha contra el cambio climático”, por ello urge actuar a quienes gobiernan y toman las decisiones.
Antes de la presentación del informe, del 26 de julio al 6 de agosto, representantes ministeriales de los gobiernos de todo el mundo se reunirán para aprobar el informe del Grupo de Trabajo 1 del IPCC.
La aprobación del informe es la antesala a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP26) que se realizará del 31 de octubre al 12 de noviembre próximos, en Glasgow (Reino Unido), en la que es previsible que se exija a los grandes emisores a “tomar más medidas” para hacer frente a la crisis climática, según Greenpeace.
“Lo que antes se percibía como una amenaza futura ya está aquí y está empeorando rápidamente. Las mortales olas de calor, las sequías, las lluvias torrenciales y el deshielo no son una sorpresa. Si hubiéramos actuado según las primeras advertencias del IPCC hace más de treinta años, hoy no estaríamos así”, incide Morgan.
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Por ello, la organización ecologista, en calidad de observadora oficial del IPCC, recuerda que “la responsabilidad para llegar a una acción que sea compatible con la crisis climática recae en todos los países, y en particular en los grandes emisores”.
Es previsible, según la ONG, que el consenso científico que recogerá el informe “añada presión sobre cómo acelerar la acción de los gobiernos” en línea con el límite de calentamiento global de 1.5 grados, compromiso recogido en el Acuerdo de París.
Se prevé que el informe recoja datos sobre cómo podría modificarse el clima en el futuro bajo diferentes posibles escenarios, con estimaciones actualizadas o la actualización de la sensibilidad del clima ante el aumento de los gases de efecto invernadero.
Asimismo, una mejor comprensión de los cambios en los fenómenos extremos y la atribución de estos fenómenos a la influencia humana, y un mayor énfasis en el cambio climático regional y en la información pertinente para la evaluación de los riesgos a menor escala, ampliada con un atlas regional interactivo en línea.