El pasado 30 de junio a través de una llamada anónima se alertò a las autoridades ante el posible contagio de 11 personas con síntomas de Covid-19. La Secretaría de Salud por medio de la Subdirección de Epidemiología, comenzó una investigación realizando pruebas rápidas que salieron en su totalidad negativas.
Razón por la que se le pidió al director de Miss Universo que las participantes y sus colaboradores se realizaran pruebas PCR, a lo cual se negó a recibir el oficio y fueron ubicadas una a una las concursantes para darles dicha información.
El evento estaba programado para el sábado 3 de julio, sin embargo, el director de Miss México decidió realizarlo el jueves 1 de julio luego de que el gobierno de Chihuahua les retirara el permiso para que se llevara a cabo el evento en un salón de la entidad. En la premiación Isela Serrano, representante de Chihuahua, no participó ya que tuvo que ser hospitalizada.
El viernes 2 de julio, Luis Jiménez, director comercial del certamen, confirmó que dicha representante tenía un resultado de PCR positivo.
El 4 de julio se tuvo un contacto con un representante de Miss México en el cual se entregaron resultados en donde se confirmó que existían otros 16 casos positivos, de estos, 15 correspondían a participantes del concurso.
La Secretaría de Salud del Estado, lamentó la falta de honestidad y transparencia del comité organizador, pidió a las concursantes y a quienes tuvieron contacto con ellas o sus colaboradores que permanecieran en aislamiento 14 días tomando en cuenta posibles síntomas.
Por su parte, Eduardo Fernández Herrera, secretario de salud de Chihuahua, en entrevista mencionó que al encontrarse en semáforo amarillo el evento contó con la participación de 300 personas, que fue un familiar de una de las concursantes quien realizó la llamada de alerta y que eran los organizadores del certamen los que debieron efectuar en un inicio las pruebas PCR y de salir positivas, cancelar el evento.
Familiares de las chicas participantes piden que los organizadores de Miss México se hagan responsables de la atención médica actual y las posibles secuelas que pudieran tener las chicas ya que varias se autorrecetaron al no saber que tomar cuando se sentían mal antes del concurso.
Mencionan que fue una irresponsabilidad del comité ocultar información tan delicada ya que a pesar de que se les aseguró que el evento se produciría bajo las medidas de prevención necesarias muchos de los asistentes resultaron expuestos al virus.