Para enfrentar los problemas de violencia de género, en la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex) debe aplicarse una política institucional integral, preventiva y no reactiva, comenzando por educar en la igualdad y en la inclusión, y en los casos en que se vea violentada la integridad física o moral de los universitarios, es obligada una atención inmediata, afirmó Yolanda Ballesteros Sentíes, aspirante a la Rectoría de la institución para el periodo 2021-2025.
Durante su comparecencia en el plantel “Mtro. Ignacio Pichardo Pagaza” de la Escuela Preparatoria, ubicado en Almoloya de Alquisiras, la primera mujer aspirante a la Rectoría, señaló que es obligatorio que al interior de la UAEMex se genere una cultura de respeto, basada no solamente en proporcionar información para la comunidad universitaria, sino en crear las condiciones para una adecuada formación y una sensibilización real, que permita reconocer y aceptar plenamente las diferencias, que deben servir solamente para enriquecer una sólida cultura de respeto al otro.
Es esencial, dijo, que en cada espacio de la Universidad se refuercen los espacios donde alumnos, alumnas y el personal docente y administrativo pueden acudir en el momento en que se sienten vulnerados o violentados en su integridad física o moral. Dichos lugares, apuntó, deben reforzarse con asesoría de un abogado o abogada que dé acompañamiento y seguimiento para iniciar una denuncia formal.
Agregó que también es fundamental dar la garantía de que cada caso tendrá una resolución justa y adecuada. Además, habrá una canalización para que las personas agredidas reciban atención médica y psicológica de ser el caso.
Al respecto, abundó, se requiere favorecer la cultura de la denuncia formal, que no puede darse si la comunidad universitaria no tiene la certeza de que habrá respuestas inmediatas para cada caso, y cero tolerancia para las o los agresores, que definitivamente no tendrán cabida en la institución.
Aseveró que el estatuto universitario es muy claro cuando habla de los derechos y responsabilidades de los integrantes de la comunidad, y entre estas últimas está el respeto hacia los demás en todos sentidos.
Asimismo, apuntó que el proceso mismo de elección de Rector o Rectora es un ejemplo de equidad que ahora se vive en la UAEMex, donde por primera vez existen dos registros y la posibilidad real de competir en las mismas condiciones y circunstancias para presentar una propuesta y demostrar que se pueden obtener resultados.
Ballesteros Sentíes reconoció su responsabilidad histórica de abrir la brecha para las mujeres, para que en los próximos años ya no importe si quien está al frente de la Universidad estatal es rector o rectora, sino los resultados que dé.
Las capacidades de hombres y mujeres, dijo, deben reconocerse por igual, hasta que que llegue el momento en que la cultura universitaria obvie la equidad y ni siquiera sea necesario hablar del tema, pero por el momento, lo que se necesita es continuar fomentando esa cultura y esa será una de las tareas más importantes dentro de la institución auriverde, concluyó.