Aranceles a México y Canadá serán del 50%, advierte la Casa Blanca

Los aranceles del 25% al acero y al aluminio anunciados por el presidente, Donald Trump, se sumarán otras tasas ya existentes sobre bienes mexicanos y canadienses

La Casa Blanca ha confirmado que los aranceles sobre el acero y aluminio de México y Canadá serán del 50%. Este incremento se debe a que se sumará el gravamen del 25% anunciado por el presidente Donald Trump, más una tasa adicional de 25% que entrará en vigor el 4 de marzo sobre otros productos mexicanos y canadienses.

Inicialmente, Trump había considerado imponer un 25% de aranceles generales a estos dos países, pero luego acordó posponer la medida hasta marzo, con el objetivo de fortalecer el control fronterizo y frenar el tráfico de fentanilo y migrantes. Sin embargo, si no se pospone más, las exportaciones de aluminio y acero de México y Canadá estarán sujetos a un 50% de arancel.

Las medidas buscan fortalecer la industria manufacturera estadounidense, la cual ha experimentado una caída debido a acuerdos de libre comercio que permiten la importación de materiales más baratos. No obstante, este enfoque podría afectar a las industrias interconectadas entre los tres países, como la automotriz, ya que muchos de sus componentes cruzan varias veces la frontera antes de la fabricación final.

Ante la situación, la presidenta de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció que enviará una carta a la Casa Blanca explicando por qué esta medida no beneficia a Estados Unidos. Además, los secretarios de Relaciones Exteriores y Economía, Juan Ramón de la Fuente y Marcelo Ebrard, respectivamente, ya están en comunicación con las autoridades estadounidenses.

Por otro lado, la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero (Canacero) pidió al gobierno mexicano que tome medidas de represalia si Estados Unidos impone los aranceles, argumentando que afectará el 75% de las exportaciones del país y pondrá en riesgo empleos clave.

El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, consideró los aranceles como “injustificables”, ya que México importa más acero y aluminio de lo que exporta a Estados Unidos, siendo el principal destino de las exportaciones siderúrgicas estadounidenses.

Este conflicto comercial amenaza con alterar el balance económico entre los países involucrados y podría tener repercusiones en diversas industrias clave para el comercio norteamericano.