Tras una serie de incidentes alarmantes, el fabricante de aviones Boeing enfrenta investigaciones intensas sobre la seguridad de sus aviones por parte de los legisladores estadounidenses.
Intensificación de la Supervisión Legislativa
El miércoles, Boeing se encontró en el centro de atención durante dos audiencias consecutivas ante el Senado de los Estados Unidos, marcando un aumento significativo en la supervisión legislativa tras recientes problemas de seguridad. Los senadores se concentraron en analizar acusaciones de fallas importantes en la cultura de seguridad de Boeing, intensificadas por un incidente en enero cuando un panel de una puerta se desprendió de un Boeing 737 Max durante un vuelo operado por Alaska Airlines.
El senador Ted Cruz, miembro destacado de la Comisión de Comercio del Senado, expresó la preocupación pública: “Los vuelos comerciales son la forma más segura de viajar, pero la percepción actual es que las cosas están empeorando. El público quiere garantías de la FAA y de los legisladores de que volar en Boeing no se ha vuelto más peligroso.”
Testimonios Reveladores
Durante las audiencias, los miembros del Senado escucharon testimonios de un panel de expertos que destacaron deficiencias persistentes en la aproximación de Boeing a la seguridad, incluso después de los mortales accidentes de dos aviones 737 Max que resultaron en la muerte de 346 personas. Un informe de febrero de este panel sugirió que, a pesar de las mejoras, la cultura de seguridad de Boeing sigue siendo problemática, y los empleados que expresan preocupaciones enfrentan presión y posibles represalias.
Javier de Luis, profesor de aeronáutica del MIT y quien perdió a su hermana en el accidente de un 737 Max 8 en Etiopía, criticó la desconexión entre las declaraciones de la gerencia sobre seguridad y la realidad en las plantas de producción. “Los trabajadores ven que la seguridad solo es prioritaria hasta que interfiere con los plazos de producción,” comentó de Luis.
En una revelación aún más alarmante, Sam Salehpour, un ingeniero de Boeing, testificó en una segunda audiencia sobre los métodos de ensamblaje deficientes en la fabricación de los 787 Dreamliners, sugiriendo que estos métodos podrían comprometer la integridad estructural de los aviones.
Demandas de Documentación y Más Audiencias
El senador demócrata Richard Blumenthal, quien preside una de las subcomisiones involucradas, junto con el senador Ron Johnson, su principal colega republicano, ha solicitado una extensa cantidad de documentos a Boeing, que datan de los últimos seis años. Blumenthal anunció que su panel planea realizar más audiencias y espera que David Calhoun, director general de Boeing, comparezca personalmente.
Respuesta de Boeing
Hasta la fecha de las audiencias, ni Calhoun ni ningún otro representante de Boeing habían asistido. Sin embargo, un portavoz de Boeing aseguró que la compañía está cooperando con la investigación y se ha ofrecido a proporcionar documentos adicionales y sesiones informativas a los legisladores.
Consecuencias Potenciales
Este escrutinio renovado por parte del Senado de EE. UU. subraya la gravedad con la que se están tomando los asuntos de seguridad de Boeing y refleja una creciente desconfianza pública en la capacidad del gigante aeroespacial para garantizar la seguridad de sus aeronaves. Con futuras audiencias en camino, la presión está aumentando sobre Boeing para que demuestre su compromiso con la seguridad aérea de manera transparente y efectiva.