El Gobierno de Bolivia ha inaugurado este martes 26 de marzo su primera planta industrial de biodiésel. Con la cual esperan disminuir la pesada carga económica que representa la subvención de los combustibles fósiles.
Durante el año pasado, el país sudamericano, destinó más de 1.800 millones de dólares para subsidiar los precios de los hidrocarburos, además de 2.974 millones de dólares para importar gasolina y diésel, según datos oficiales.
La planta de Biodiésel 1, ubicada en la región agroindustrial de Santa Cruz, es solo el primer paso de este ambicioso proyecto. Se prevé la próxima puesta en marcha de otra planta similar en la ciudad altiplánica de El Alto en los próximos meses. Ambas plantas tienen una capacidad de producción conjunta de 3.000 barriles por día.
Además, para el año 2025, está programada la inauguración de la planta de diésel renovable HVO, que producirá 9.000 barriles por día. Esta planta utilizará una amplia gama de materias primas, que incluyen aceites, aceite crudo y grasa animal, entre otros, según la estatal YPFB.
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