Hasta el momento, el movimiento islámico ha confirmado la trágica muerte de cuatro personas debido a la interrupción del suministro de oxígeno medicinal en el hospital Nasser de Jan Yunis, en Gaza. El Ministerio de Salud de Hamás informó sobre esta lamentable situación después de que las fuerzas israelíes tomaran el control del complejo sanitario.
La falta de electricidad provocó la detención de los generadores del hospital, dejando a pacientes en cuidados intensivos y niños en la guardería en grave riesgo. Se estima que seis pacientes más se encuentran en peligro debido a esta situación crítica.
El movimiento islamista responsabilizó directamente a las fuerzas israelíes por la vida de los pacientes y el personal médico afectado. Cientos de personas, entre pacientes, personal médico y civiles, permanecían dentro del hospital cuando se produjo la interrupción del suministro de oxígeno.
La situación se agrava con las acciones del Ejército israelí, que realizó una operación en el hospital tras alegar que tenía información sobre la retención de rehenes y la posible presencia de cuerpos de cautivos en el establecimiento. Además, se informó que 20 sospechosos fueron detenidos en relación con ataques anteriores.
El hospital Nasser de Gaza se ha convertido en un refugio crucial para miles de civiles que huyen de la guerra en las últimas semanas. La interrupción del suministro de oxígeno y la presencia militar han generado preocupación y alarma entre la población local y la comunidad internacional.