Pobres Criaturas, la crueldad de estar vivo

Por Carlos Torres Trejo

Definitivamente una de las grandes favoritas dentro de las nominadas al Óscar este 2024 es “Poor Things”, dirigida por Yorgos Lanthimos. Se trata de una adaptación de la novela homónima de Alasdair Gray, publicada en 1992. La película ha sido muy bien recibida por la crítica y al parecer por el público también. Algunos hasta aseguran que se trata de la mejor actuación de la carrera de Emma Stone.

La película, hecha a manera de cuento posmoderno, aborda temas como el nihilismo, el humor negro y el dolor de estar vivos. El mundo es un lugar cruel y absurdo, y los seres humanos somos criaturas imperfectas y contradictorias.

“Pobres criaturas”, como fue titulada en español, es una mezcla de géneros y estilos. A ratos se siente como una comedia, a ratos como un tratado de filosofía. El director utiliza un lenguaje visual y narrativo muy original, que puede resultar chocante o perturbador para algunos espectadores.

Emma Stone interpreta a Bella Baxter, una mujer que es resucitada por el doctor God Baxter. Su interpretación es compleja e interesante, y transmite la extrañeza, la fascinación y la crueldad que caracterizan a su personaje. Willem Dafoe interpreta a un anciano y extravagante doctor God Baxter. No podemos dejar de lado a Mark Ruffalo, quien interpreta al casanova Duncan Wedderburn. Su actuación es exagerada y burlesca, y refleja la locura y el libertinaje del personaje.

La producción de la película es impecable. La dirección de arte es simplemente maravillosa, y los vestuarios de Emma Stone son alucinantes. La fotografía es también muy original, y utiliza un uso anómalo de los lentes para crear una atmósfera surrealista que cautiva de principio a fin. Incluso el abuso de la pantalla verde se siente apropiado, resaltando esa sensación onírica y muy agridulce.

Si bien Lathimos nos tiene acostumbrados a películas complejas y hasta un tanto crípticas, la adaptación resulta llamativa para todo público, aunque no deja de causar polémica, en especial por su tratamiento sobre la libertad sexual. El final es agradable y esperanzador, aunque por un momento pareciera que acabará en suicidio.

Una visión romántica de la libertad, bajo las reglas de la sociedad actual. Una película que requiere un espectador abierto a experimentar cosas nuevas. Veremos con cuántas estatuillas la premia la Academia.