Muchas veces para los padres de familia, resulta difícil que sus hijos podrían sufrir de algún trastorno, sin embargo, si hablamos respecto al autismo resulta de importancia detectarlo pues representa una gran diferencia en el desarrollo general del menor. Si llegará a ser tu caso el que sospeches que tu hijo o el hijo de un conocido padezca de autismo, aquí te explicaré qué es y cuales son los síntomas detectables, sabiendo esto es importante acudir con un especialista para que te diga cuál es la mejor manera de llevar el desarrollo del niño.
¿Qué es el autismo?
El autismo, o trastorno del espectro autista (ASD por sus siglas en inglés), se refiere a una gama de trastornos que se caracterizan por dificultades con las habilidades sociales, conductas repetitivas, problemas con el habla y la comunicación no verbal, así como por diferencias y fortalezas particulares.
Síntomas o conductas del autismo
Las destrezas de comunicación e interacción sociales pueden ser un desafío para las personas con autismo algunos ejemplos de estos síntomas son:
- Evitar mirar a los ojos a otra persona o no mantener el contacto visual
- No responder cuando lo llaman por su nombre
- No mostrar expresiones faciales como de felicidad, tristeza, enojo y sorpresa, hacia los 9 meses de edad
- No participar en juegos interactivos simples como dar palmaditas con las manos
- Usar pocos o ningún gesto
- No compartir intereses con otras personas
- No apuntar a algo interesante para mostrarlo
- No notar cuando otras personas están lastimadas o molestas
- No notar a otros niños ni jugar con ellos
- No jugar a ser otra cosa, como un maestro o superhéroe
- No cantar, bailar ni actuar
Las personas con TEA tienen conductas que pueden parecer inusuales, las cuales los distinguen y estos pueden ser:
- Poner juguetes u otros objetos en fila y molestarse cuando se cambia el orden
- Repetir palabras o frases una y otra vez (esto se llama ecolalia)
- Jugar con juguetes de la misma manera todo el tiempo
- Enfocarse en partes de los objetos (por ejemplo, en las ruedas)
- Irritarse con cambios mínimos
- Tener intereses obsesivos
- Tener que seguir ciertas rutinas
- Aletear las manos, mecer el cuerpo o girar en círculos
- Reaccionar de manera inusual a la forma en que las cosas suenan, huelen, saben, se ven o se sienten
