Investigaciones recientes realizadas por la universidad de Harvard, revelan como podemos tener nuevos hábitos que ayudan a mejorar la salud del cerebro, aquí te decimos cuáles son y cómo ponerlos en práctica. Sin duda, la salud del cerebro uno de los aspectos más importantes que debemos tener en cuenta. Por ello, los expertos de la universidad, han demostrado cómo diferentes hábitos del día a día podrían mejorar la inteligencia a la hora de retener, memorizar y reutilizar el conocimiento que guardamos en el cerebro.
1. Aprende algo nuevo para estimular tu mente La mente es un músculo que debe ejercitarse. Cada vez que te propones adquirir una nueva habilidad, como aprender un idioma o cocinar algo complejo, estimulas tus neuronas y la comunicación entre ellas. Si se te complica, no te preocupes, puedes intentar con un juego de memoria para mantener tu mente activa.
2. Involucra a tus sentidos, entre más sean mejor ya que cuantos más sentidos se involucren en el proceso de aprendizaje de algo, mayores serán las posibilidades de retener ese recuerdo. Un estudio de Harvard, realizado a un grupo de ensayo se les mostró una serie de imágenes emocionalmente neutras, cada una de las cuales se presentaba también con un olor. Posteriormente, se les mostró otras, esta vez sin los aromas, y se les pidió que señalaran cuáles habían visto antes.Los sujetos recordaron muy bien todas las imágenes emparejadas con aromas, sobre todo las asociadas a olores agradables. Las imágenes cerebrales mostraron que el córtex piriforme (la principal región del cerebro dedicada al procesamiento de los olores) comenzaba a activarse cuando las personas veían cosas vinculadas con olores.
3. Repetir palabras en voz alta. El escuchar palabras en voz alta hace más probable que se recuerden, al igual que el proceso de repetirlas. Esto funciona sobre todo cuando aprender algo nuevo, como conocer a una nueva persona. Si te presentan a alguien y utilizas su nombre varias veces en la primera conversación que mantienen, seguramente vincularás su cara con su nombre y lo recordarás con mucha más facilidad.
4. Aprende por partes y retendrás mejor. Un ejemplo es aprender un número de teléfono. Es poco probable que lo recuerdes si piensas en él como un número de diez dígitos, pero si lo divides en partes (3 dígitos, 3 dígitos, 4 dígitos, o 5 y 5 dígitos), será más fácil que la memoria lo retenga. Divide y procesa la información así, en lugar de como un todo, y retendrás mucho más.
5. Relaciona recuerdos con información nueva. Vincula partes de información nueva con recuerdos, esta técnica funciona como bloques de construcción para una mente más fuerte. Cuanto más vinculados estén los estímulos entre sí, más poderoso e infalible será tu cerebro. Si te esfuerzas en conectar la nueva información con pasada que ya son relevantes para ti, serás capaz de interiorizar ambas cosas.
6. Comer con la mano contraria Aunque no lo creas cepillarse los dientes con la mano contraria a lo que utilizas obliga a tu cerebro a esforzarse más para realizar las mismas tareas, haciéndolo más activo. Puedes también intentar escribir, comer para adquirir el hábito de usar ambas. Esto reta a tu mente a hacer diferentes conexiones y evita (hasta cierto punto, por supuesto) el deterioro de la edad.
7. Ten vida social y conoce nueva gente. Muchos expertos aseguran que tener amigos es bueno para la mente. Conocer gente nueva y participar en interacciones sociales se considera mucho más sano que el aislamiento, que también puede provocar depresión. Relacionarte con amigos te obliga a mantener conversaciones y debates saludables, además de aprender nuevos hábitos y conocer opiniones que difieren de las propia
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