Este 15 de febrero la Fiscalía estadounidense inició su alegato final contra Genaro García Luna, acusado de narcotráfico, haciendo hincapié en el testimonio del narcotraficante Sergio Villarreal Barragán, alias ‘El Grande’, hombre de confianza de Arturo Beltrán Leyva.
En este sentido, la fiscal Saritha Komatireddy dio a conocer a los miembros del jurado que, gracias a la ayuda y protección que García Luna proporcionó al Cártel de Sinaloa a cambio de sobornos millonarios, fue posible que esta organización criminal pudiera ampliar su territorio, eliminar bandas rivales e introducir toneladas de cocaína en Estados Unidos.
De acuerdo a medio nacional, Komatireddy dijo: “Sin el apoyo de Genaro García Luna habría sido prácticamente imposible que Sinaloa hubiera podido movilizar tantos cargamentos de cocaína”.
Asimismo, insistió en que la declaración de ‘El Grande’ contra García Luna supone una “prueba específica y creíble de la culpabilidad del acusado”, a quien calificó como un hombre “inteligente, ambicioso y poderoso” que “utilizó su posición para ganar millones de dólares de la gente que tenía que haber perseguido”.
Genaro García Luna dirigió la Agencia Federal de Investigación de México de 2001 a 2005 y fue secretario de Seguridad Pública de 2006 a 2012, periodo en el que colaboró estrechamente con las agencias antinarcóticos y de inteligencia estadounidenses en el marco de la ofensiva del expresidente Felipe Calderón contra los cárteles.
Por su parte, García Luna se declaró inocente de las acusaciones de Estados Unidos de haber aceptado millones de dólares para proteger al cártel dirigido en su día por el encarcelado narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Aunque se preveía que podría durar dos meses, el juicio en el tribunal federal de Brooklyn duró cuatro semanas. Durante este tiempo, los miembros del jurado han escuchado el testimonio de miembros del cártel encarcelados que están cooperando con los fiscales, así como de funcionarios estadounidenses y mexicanos encargados de hacer cumplir la ley.
Los abogados del acusado argumentaron que los traficantes le implicaron porque querían vengarse y porque buscaban penas más bajas.
Entre los testigos compareció Edgar Veytia, ex fiscal general del estado mexicano de Nayarit, quien testificó que, en 2011, tras resistirse a una oferta de soborno de un socio de El Chapo, éste le dijo que García Luna estaba de su lado y había aceptado millones de dólares.
“Me dijo que había arreglado esta situación a nivel federal”, dijo Veytia en el estrado el 7 de febrero. Veytia fue sentenciado en 2019 a 20 años de prisión tras declararse culpable de un cargo de conspiración de narcóticos en Estados Unidos.
El abogado defensor, preguntó a Veytia por qué nunca mencionó el nombre de García Luna a los investigadores estadounidenses antes de ser sentenciado.