Por: Alethia Hernández
El sistema de Salud Mexicano ha sido sin duda una de las estructuras más complejas y completas que hemos tenido por décadas, dando atención de primer nivel a un gran sector de la ciudadanía,sin embargo, en la actual administración, se ha desplomado por completo.
Y agravando aún más su situación, llegó la pandemia de covid-19, y con ello, derrumbando uno de los grandes pilares en la institución pública.
Es por este último tema que, se destinaron 824 mil 181 millones de pesos, ( lo que equivale a un incremento del 0.37% del PIB nacional, respecto a 2021, con ello, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, (OCDE) esto no es suficiente, y esto por las enfermedades como obesidad y problemas cardiovasculares que persisten y que además van en aumento y sumado al covid-19 empeoran el panorama de salud pública.
Además de esa problemática, se incluye la falta de compra y distribución de medicamentos que existe en todo el país y que el gobierno mexicano no ha sabido resolver desde que inició este sexenio, afectando personas con diversos padecimientos como diabetes, cáncer, hipertensión arterial, entre otros más.
Y mientras eso sucede día a día, el Presidente de México, Licenciado Andrés Manuel López Obrador, en mayo de la presente anualidad, dijo en su mañanera del día 3 mayo, que México tendrá un sistema de salud óptimo en el primer trimestre de 2023. Aclarando que existe suficiencia presupuestal al respecto..
Pero, la realidad es que, en tres año y medio de su administración, podemos ver como va decayendo este Sistema de Salud Pública, primeramente por la no renovación de contratos con farmacéuticas, que el mismo Presidente de México llamo “Corruptas” y después, por la eliminación del Seguro Popular, en el que estaban afiliados más de 40 millones de personas, los más necesitados y quienes al día de hoy, 26 millones, no cuentan con un sistema de salud en donde se puedan atender, ya que el INSABI, no funcionó efectivamente desde su arranque, y con la llegada de la pandemia covid-19, se tuvo que improvisar el IMSS del Bienestar, esto con la finalidad, de que dicha institución pudiera dar atención en salud a esos millones, lo que llevó a colapsar por completo el Sistema de Salud Pública.
Dicho de otra forma, se requieren nuevas opciones, personal que las dirija y cubra la seguridad social de la población, lo anterior para no colapsar al 100% la Salud en México. Pero, sin eliminar las pocas opciones que hoy tienen los más vulnerables para atender su salud, como lo son, los consultorios adyacentes de farmacias, quienes han
atendido a más de 4 millones de mexicanos, cifra mayor que la del Instituto Mexicano del Seguro Social, y en donde, los pacientes hoy no sólo padecen atención médica oportuna, sino también, la obtención de medicamentos prescritos para sus padecimientos o enfermedades.
Hoy, la Secretaría de Salud, debe atender el llamado de la población y proporcionar de manera eficaz atención en seguridad social para todos los ciudadanos, y no eliminar las pocas opciones que aún quedan para atenderse la ciudadanía.
El sistema de Salud tipo Dinamarca, que el Presidente de México prometió, se ve muy muy lejano de la realidad mexicana.
Y aún así, promete que será óptimo en 2023, habrá que recordarle que primero debe existir un Sistema de Salud, y no ruinas de él.