Un micrometeorito impactó contra el espejo principal del telescopio James Webb

Aumenta el suspenso en la épica historia del Telescopio Espacial James Webb (JWST). El moderno observatorio sobrevivió a un reciente impacto de micrometeorito, que resultó ser más fuerte de lo previsto por las pruebas en tierra. Afortunadamente, todos los sistemas funcionan con normalidad y no ha habido mayores problemas, informó la NASA.

Las colisiones con micrometeoroides son un evento común para cualquier nave espacial, especialmente aquellas ubicadas en el espacio interplanetario. Por eso los ingenieros toman en cuenta estas eventualidades al momento de diseñarlas y construirlas. El nuevo observatorio espacial James Webb no fue una excepción.

El telescopio cuenta con un enorme espejo primario segmentado y un escudo térmico de cinco capas hecho de capas delgadas de Kapton. Incluso en la etapa de fabricación de los espacios en blanco de los espejos, fueron probados para determinar su resistencia al bombardeo de micrometeoroides.

Además, el observatorio puede maniobrar a través de una lluvia de veloces meteoritos. Sus cables, entre otros elementos importantes, están equipados con un grueso aislamiento protector capaz de resistir estas diminutas rocas espaciales.

Siente el impacto 

Desde el lanzamiento del James Webb a fines del año pasado, su equipo ha registrado cuatro pequeños impactos de micrometeoritos que coincidieron con las predicciones. Sin embargo, en el período del 23 al 25 de mayo, un micrometeoroide golpeó el segmento C3 del espejo principal.

Este último impacto resultó ser más poderoso que los simulados, y no formaba parte de una lluvia de meteoritos, por lo que era imposible predecirlo. Tras ello, se formó un equipo especializado de ingenieros para buscar formas de mitigar los efectos de más impactos de micrometeoritos de esta escala.

Actualmente, todos los sistemas del observatorio funcionan con normalidad y los ingenieros han realizado el primer ajuste de la posición del segmento. En el futuro, se realizarán ajustes adicionales en la posición de los segmentos de los espejos, sin afectar el próximo cronograma de trabajo.

Importancia 

El tremendo tamaño y la sensibilidad de Webb lo convierten en un detector altamente sensible de micrometeoritos. Con el tiempo, Webb ayudará a mejorar el conocimiento del entorno de partículas de polvo del sistema solar en L2, para esta y futuras misiones.

«Con los espejos de Webb expuestos al espacio, esperábamos que los impactos ocasionales de micrometeoritos degradaran con gracia el rendimiento del telescopio con el tiempo», comentó Lee Feinberg, del Centro de vuelo espacial Goddard.

“Desde el lanzamiento, hemos tenido cuatro impactos de micrometeoritos medibles más pequeños que fueron consistentes con las expectativas. El más reciente resultó ser más grande de lo que suponían nuestras predicciones de degradación”, agregó.

No obstante, la agencia usará estos datos de vuelo para actualizar el análisis de rendimiento a lo largo del tiempo. Asimismo, desarrollarán enfoques operativos para asegurarnos de maximizar el rendimiento de imágenes del Webb en la mejor medida posible durante muchos años.

En estos momentos, James Webb se encuentra en una órbita de trabajo alrededor del segundo punto de Lagrange en el sistema Sol-Tierra: El observatorio está calibrando instrumentos científicos, la última etapa de la puesta en servicio. Las primeras fotografías científicas se transmitirán a la Tierra el 12 de julio de 2022.