Día Mundial del Sueño

Día Mundial del Sueño

¡FELIZ DÍA DEL SUEÑO!, ¿Y tú, dormiste bien?

El viernes anterior al equinoccio del marzo se celebra el Día Mundial del Sueño, con la finalidad de sensibilizar a la población acerca de la importancia de dormir bien.

Disfrutar de un buen descanso es primordial tanto para nuestra salud física y mental. Se recomienda acudir a un especialista especializado si la calidad del sueño disminuye.

¿Realmente existe un día del sueño?

¡La respuesta es sí! Esta efeméride ha sido creada por iniciativa de un grupo de proveedores y miembros de la comunidad médica vinculados con el área de investigación y medicina del sueño, con la finalidad de prevenir y manejar los trastornos del sueño, así como los beneficios para la salud y el bienestar personal.

El evento es promovido cada año por la Asociación Mundial de Medicina del Sueño y otras organizaciones relacionadas

Es una celebración anual en la que se tratan temas relacionados con el sueño, un elemento esencial para la vida humana.

Conmemoración en que participan distintos profesionales y expertos en la materia, dando  a conocer la importancia en la prevención y los posibles tratamientos a los problemas del sueño que, cada día, afecta a un gran número de personas en todo el mundo.

Un sueño reparador para una mejor calidad de vida

De acuerdo a los últimos estudios realizados, se llegó a la conclusión de que nuestra calidad de vida mejoraría notablemente si dedicáramos el tiempo suficiente a tener un sueño de calidad.

Sin embargo, en el mundo agitado de hoy, la mayoría de las personas no logran descansar la cantidad de horas que se requieren para tener un sueño reparador. Se estima que una persona adulta requiere entre 7 y 8 horas de descanso para restaurar las funciones del organismo.

La falta del mismo trae como consecuencia daños irreparables a la salud y la calidad de vida.

A continuación mencionamos los principales tipos de trastornos del sueño:

  • Apnea del Sueño: patrones anormales en la respiración durante la etapa de sueño, interrumpiendo el sueño profundo.
  • Insomnio: dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido.
  • Narcolepsia: somnolencia extrema o trastorno crónico del sueño durante el día.
  • Síndrome de las piernas inquietas o enfermedad de Willis-Ekbom: impulso de movilizar las piernas al tratar de dormir, así como sensaciones de hormigueo, ardor y comezón.

Si no podemos disfrutar de un sueño de calidad, lo más probable es que nuestro cuerpo comience a experimentar una serie de cambios y alteraciones, como por ejemplo, trastornos en el sistema nervioso, endocrino e inmunológico, que conllevarán a otras complicaciones más graves y que están asociadas a las denominadas enfermedades degenerativas.