Las historias paralelas y diametralmente opuestas de dos jóvenes jaliscienses que conmocionaron al país.
Luz y sombra, la alegría de ver sueños cumplirse y a la par la horrible pesadilla convertida en en una cruenta realidad, son la esencia de este texto que compartimos para usted.
El patinador jalisciense Donovan Carrillo vive momentos de gloria en los Juegos Olímpicos de invierno en Beijing 2022, pues ha clasificado a la final del patinaje
artístico en la edición de una justa que debido a una serie de factores es alejada y compleja para cualquier atleta en nuestro país, simultáneamente
en el municipio de Tlajomulco de Zuñiga -al sur del área metropolitana de Guadalajara- Eduardo Salomón salvó la vida de sus cuatro hermanos, a cambio
de ofrecer la propia, cuando un grupo de hombres armados irrumpieron en su domicilio para levantarlo y posteriormente quitarle la vida a sus 16 años de edad.
Ambas historias parecen extraidas de algún guión cinematográfico, pues para Donovan Carrillo, su familia y el país entero, su participación tras 30 años de ayuno de
México en esta disciplina de los juegos invernales es por si misma histórica, como heróica su participación con lo ubica palmo a palmo con la élite del patinaje a nivel mundial; en el caso de Eduardo Salomón, la desaparición forzada en el propio hogar es motivo de dolor y de indignación ante la incapacidad u omisión de los diferentes gobiernos de frenar esta clase de delitos en el país.
Con lágrimas en los ojos, los padres de ambos jóvenes, tan distantes un escenario de otro, como lo es geográficamente Beijing de Tlajomulco derramaron sobre
sus rostros para vibrar de alegría con el orgullo de ver coronado el esfuerzo conjunto de ellos y su hijo en la pista olímpica invernal; en el otro extremo del mundo los padres y hermanos de Eduardo levantaban la voz a las autoridades para saber el paradero de su vástago mayor, con la incertidumbre e impotencia de no saber ni quién,ni por qué fue secuestrado; siendo horas más tarde el lapso de tiempo en el que la Fiscalía de Jalisco les confirmó su peor suspicacia, la confirmación de la autoridad del paradero de su pequeño, ya sin vida.
El 4 de febrero a las 16:30 horas a plena luz del día, tres hombres irrumpieron en el domicilio de Eduardo, en el Fraccionamiento Los Sauces 2 en Tlajomulco para llevárselo y con él todas sus aspiraciones en la vida, siendo su legado el esconder y salvar la vida de sus hermanos quienes fueron escondidos por Eduardo, evitándoles un destino seguramente similar al suyo, el 4 de febrero del 2022, Donovan Carrillo se preparaba para su brillante actuación en los Olímpicos de Beijing 2022.
La historia de Eduardo Salomón se cerró el martes por la tarde, cuando con globos blancos, lágrimas en los rostros de amigos, familiares y sus pequeños hermanos se elevaron al cielo para despedirlo y agradecer su acto heróico de 4 días antes, le dijeron gracias y adiós en el panteón de la colonia la Unión del Cuatro en Tlajomulco, la de Donovan aún podrá escribir más páginas en su carrera deportiva y en su vida, dos jóvenes jaliscienses, que se merecen el respeto y el aplauso de muchos de nosotros, Quizá dentro de Eduardo podría esconderse un Donovan en la pista, en la vida o el alguna otra disciplina, es importante cuidar a los jóvenes del país, es doloroso contar por miles a los desaparecidos y es triste no poder atestiguar más historias de vida y éxito como la del patinador jalisciense.
Así el contraste para muchos niños y niñas y jóvenes en un México que sigue siendo un sitio muy complicado para crecer, desarrollarse, vaya, para sobrevivir.
En uno de sus más grandes éxitos HEROES; David Bowie entonó, que todos podemos ser héroes, al menos un día de nuestra vida, Eduardo y Donovan lo han sido y para ellos y sus familias con cariño, respeto y el abrazo solidario este pequeño homenaje.
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Pablo Vázquez Rivera
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