México vive la 4ta ola de contagios y poco a poco más de una cuarta parte de los estados del país (28.1%) se encuentran con más de la mitad de sus camas de hospitalización general, con ventilador y con ventilador en unidades de cuidados intensivos (UCI) ocupadas, incluida ya la Ciudad de México.
Zacatecas y Aguascalientes rebasan la línea de seguridad en ocupación de camas con ventilador en unidades de cuidados intensivos al registrar un 83.33% y 76.66% respectivamente.
De acuerdo con datos del Sistema de Información de la Red IRAG, ocho entidades tienen entre 50% y 70% de ocupación de camas en hospitalización general.
Se trata de Baja California Sur con 69.62%; Chihuahua con 63.42%; Durango, con 52.54%; Coahuila de Zaragoza, con 55.13%; Aguascalientes, con 53.95%; Ciudad de México, 52.82%; San Luis Potosí, con 52.77% y Zacatecas, con 52.04 por ciento.
Además, Aguascalientes tiene también seis de cada diez de sus camas con ventilador ocupadas (59.37 por ciento).
Respecto a la ocupación de camas con ventilador en unidades de cuidados intensivos la Red reporta a cinco entidades que se mantienen entre un 50% y 70% de ocupación: San Luis Potosí con 62%: Querétaro con 56.25%; Chihuahua con 55.26%; Durango con 52.38% y con Coahuila 50 por ciento.
En total siete estados se encuentran en color amarillo y dos en rojo por la ocupación hospitalaria que registran actualmente.
El pasado 19 de diciembre, de acuerdo con la red IRAG, tres entidades tenían entre un 50 y 70% de hospitalización: Chihuahua con 62% en camas de hospitalización general y 58.33% en camas con ventilador en UCI; Coahuila, con 66.66% en camas con ventilador en UCI y Aguascalientes con 51.61% en la misma área.
Según el histórico de ocupación hospitalaria el 21 de agosto se llegó al punto máximo en las tres olas de la pandemia de covid-19.
Hace una semana el titular de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia del Coronavirus de la UNAM, Samuel Ponce de León previó que los servicios de salud se van a ver saturados en poco tiempo debido a la alta transmisibilidad de la variante ómicron que es capaz de infectar a aquellas personas vacunadas, incluso con su esquema completo y con una tercera dosis de refuerzo.