Con el incremento de los contagios por la variante Ómicron del Covid-19, la OMS y otras organizaciones sanitarias han recomendado el uso de cubrebocas N95, pues se ha observado que ofrecen una protección más eficaz contra esta variante a comparación de las mascarillas hechas de tela. Sin embargo, su elevado costo hace que la población se pregunte cuánto es el tiempo máximo que se pueden usar.
Los materiales de los cubrebocas N95 no se degradan con facilidad
Linsey Marr, profesora de Ingeniería Civil y Ambiental en Virginia Tech, explicó que los materiales y la capacidad de filtración de los cubrebocas N95 “no se degradarán a menos que la frotes físicamente o le hagas agujeros. Tendrías que estar en aire muy contaminado… durante varios días antes de que perdiera su capacidad de filtrar partículas. Entonces, realmente puedes usarlas durante mucho tiempo”.
“La gente ha estado hablando de 40 horas, creo que está bien. Las correas se aflojarán demasiado o tal vez se rompan antes de que pierdas la capacidad de filtración”, agregó.
Por otra parte, la profesora de Biología en la Universidad de Massachusetts Dartmouth, Erin Bromage, explicó que la razón por la que se designa a los cubrebocas N95 como de un sólo uso se debe a que están categorizadas como mascarillas médicas.
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¿Cuándo reutilizar un cubrebocas N95 y cuándo no hacerlo?
De acuerdo a los expertos, para reutilizar las mascarillas N95 de forma segura, lo principal es evitar tocar la parte exterior frontal de la mascarilla cuando te la pongas. “Definitivamente evita la parte justo en frente de donde respiras, como justo en frente de tu nariz y boca”, agregó la profesora Linsay Marr.
La experta agregó que incluso pues reutilizar tu mascarilla después de estar en un entorno cerrado lleno de gente, como el metro. “Estas mascarillas están realmente diseñadas para manejar muchas partículas y seguirán funcionando”, expresó Marr.
Así mismo, la profesora explicó que en caso de estar expuesto al virus, si es necesario cambiar de cubrebocas. “Si estuviera trabajando en una oficina y usara una N95 y alguien en mi oficina hubiera dado positivo, sabría que estaba bien protegido. Pero probablemente tiraría esa mascarilla. Porque esa mascarilla ha hecho su trabajo de atrapar el virus y ni siquiera quiero correr el riesgo de que esté allí y se me meta en las manos o lo que sea”.
Por otra parte, los expertos coinciden en que si tu mascarilla N95 se humedece, se ensucia visiblemente, se dobla, se arruga o se daña de alguna otra forma, incluso por usar maquillaje, debes reemplazarla, ya que estas condiciones podrían disminuir la eficacia.
“Cuanto más tiempo la usas, más material atrapa, lo que significa que la transpirabilidad, la resistencia de la mascarilla comienza a disminuir. Uno de los primeros indicadores de poder cambiarla si se ve bien y limpia es que se siente un poco más difícil respirar. Cuando parece haber más resistencia con cada respiración”, recalcó Bromage.
Así puedes desinfectar tu cubrebocas
La profesora Marr explicó que si la mascarilla está expuesta a la luz solar, los microorganismos que haya atrapado morirán en el transcurso del día.
“Cosas como la temperatura y la luz solar tienen un efecto, pero no quieres tirarlo en un horno o microondas. Solía pegar el mío en el salpicadero de mi coche en verano, y eso sería más que suficiente con respecto al calor y la luz directa que recibía. Pero en realidad, no hay nada que puedas hacer para prolongar su vida a través de una limpieza accesible para una persona promedio”, comentó Bromage.
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“Debido a que las mascarillas N95 tienen esa carga estática especial que ayuda a filtrar los virus, no debes lavarlas, ya que el agua disipará la carga”, agregó Marr.
Finalmente, los expertos indican que el el riesgo de contaminación al reutilizar los cubrebocas N95 es más bajo que el riesgo de no usar una N95 y respirar partículas.
