Red Pública-2022 necesita de mucha política

 

Edgar Mereles Ortiz.

 

 

“Hacer politica solicita de voluntad,

espíritu, visión de futuro y esfuerzo.”

Hermenegildo García.

A Sergio Octavio Mereles Ortiz

por sus insuperables huellas de 56

años de un feliz andar.

 

Casi 500 asesinatos en la primera semana de este incipiente año, me parece que es un dato trágico que pone en evidencia los graves problemas en el análisis, estudio, diagnóstico, juego de escenarios, toma de decisiones y voluntad, mucha voluntad politica para que las cosas sucedan.

Seria un elemento banal y estúpido decir que este sistema cuatroteologista, dixit de Carlos Urzúa, es el responsable de esta escalda de violencia, muerte, extorsión, secuestro y el tráfico de todo lo ilegal en nuestro territorio nacional. Este problema inicio hace dieciocho años con el gobierno de Vicente Fox, quien de manera insolente dejo crecer la delincuencia.

Fue tan elevado el desarrollo de los actos delictivos que Felipe Calderón tomó una de las decisiones que mayores costos nos ha dejado: sacar al ejercito de los cuarteles y con sus efectivos combatir al crimen en cualesquiera de sus manifestaciones, pero poniendo mayor énfasis en el narcotráfico, secuestro y extorsión, delitos que han puesto de cabeza a la sociedad mexicana.

Enrique Peña llegó con dos bombas en el portafolios: pobreza y delincuencia. Se esperaba un gobierno creativo, innovador, cuyo gabinete trabajaba en equipo y tocaba por nota, pero la realidad nos tiró de la nube en que viajábamos. La corrupción galopante e imparable en todos los niveles del gobierno federal y otros estatales, la arrogancia de Peña y su círculo cerrado hicieron que todos los esfuerzos institucionales se diluyeran.

Andrés Manuel presumía tres fortalezas: conocimiento de los problemas desde la raíz, una estrategia con base en inteligencia, planeación, unidad de mando, cultura de legalidad, fortalecimiento de los derechos humanos, la reparación del daño y combate a la pobreza; y una politica social que resolviera de fondo los problemas de rezago, subdesarrollo y pobreza. Nada de eso se ha hecho por diversas razones:

Primero. Tengo la percepción de que algunos dirigentes y personajes del gobierno actual, en la campaña presidencial del 2018, presuntamente pactaron con organizaciones locales, regionales y nacionales del crimen organizado. Hoy no podemos dejar de notar un imponente ambiente de impunidad, protección y trabajo coordinado entre los delincuentes, lideres de morena y funcionarios de gobierno. La información que existe en algunos escritorios de oficinas del gobierno norteamericano detalla los operativos financieros, políticos y electorales que desarrollaron los narcotraficantes para la victoria de Morena en Nayarit, Colima, Sinaloa, Sonora y Zacatecas.

Dos. Me parece que el diagnóstico del Cuarto Reih no era del todo exacto sobre los problemas nacionales, sus causas y consecuencias. La pobreza se quiere combatir con un sistema de subsidios que no soportan los contribuyentes. El sistema educativo esta secuestrado entre los caprichos de dos organizaciones sindicales que amordazan y someten a las autoridades educativas. La politica energética quedó en manos de tres familias con intereses en los negocias de generación de energía eléctrica, carbón y venta de instalaciones petroleras. Bartlett, Guadiana y Nahle. Por si fuera poco, las amenazas de Trump para imponer una política de persecución migratoria han dañado la imagen internacional de ser un país hospitalario, solidario y facilitador para las crisis mundiales y de la región.

Tercero. La pandemia. De todos los males tuvo que llegar la pandemia y es aquí donde el gobierno y su presidente demostraron el cobre. El titular del ejecutivo federal hizo uso de frases erráticas, políticas sin sentido, una visión aldeana del contagio y un menosprecio a las consecuencias. Es necesario, urgente que el Estado Mexicano convoque a la nación por sectores sociales, productivos científicos, académicos, económicos y culturales a decidir qué vamos a hacer en la comunicación, la convivencia, la movilidad y muchas áreas más del desarrollo humano, con diagnóstico, estudios, análisis y decisiones parciales la nación no podrá salir adelante.

México necesita de políticos que amen, disfruten y tengan pasión por la politica, la buena, la que da resultados y genera consensos de larga duración. Que vuelvan los políticos profesionales, esos que toman decisiones para solucionar problemas y no para las encuestas; que regresen los profesionales de la política que tiene palabra, carácter y voluntad para enfrentar a todos los males, empezando el de la corrupción en la clase politica que está en todas partes. Queremos políticos sin codicia, hambre y pobreza humana. Que regresen los Hebertos Castillo, los Reyes Heroles, los VIcencios Tovar. Que se vayan los improvisados, los derrotistas y que pobretean a la nación. Claro todo eso puede suceder si usted, señora, y usted, señor, están inconformes con lo que está sucediendo.

De la Fábrica de Santa Rosa:

Hoy falleció Tomás Mojarro, uno de los hombres cubierto de congruencia, ideas, pasión y convicción por un México mejor, pacífico, justo, democrático e igualitario. Toda su vida la dedicó a la construcción de una izquierda que llegara al poder e hiciera lo que el priato no pudo. Hizo de la radio su trinchera monumental para denunciar los excesos, abusos y atropellos de las oligarquías nacionales y del imperialismo yanqui. Afortunadamente, no llegó a ver el final de la destrucción que el fascismo desde el movimiento de regeneración nacional está llevando a cabo. ¡Hasta pronto, Valedor!

Desde algún lugar donde hubo establos, alfalfares y pastizales de Coapa, Ciudad de México. 11 de enero 2022.

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