Sopa de letras – Los reyes de la casa y la grafología

Una de las temporadas más bonitas de nuestra infancia y que esperamos con ansia e ilusión es la llegada de los Reyes Magos, si es el caso de tus hijos, hermanos, sobrinos, nietos, aquí te explico a groso modo como puedes aplicar la grafología en sus cartitas o dibujos ya que la grafología se puede aplicar a partir de los 18 meses de vida en esa edad ya tienen más capacidad motriz y aunque aún hay torpeza, es donde se empiezan a encontrar rasgos que los van a definir en su vida pues a pesar de ser muy evolutiva se puede empezar a trabajar con el carácter, las actitudes, personalidad e inclusive ciertos traumas.

Es muy usual que si ya van a la guardería o escuela les proporcionen una hoja con un dibujo para iluminar, hay chiquitos que rayan toda la hoja sin respetar el dibujo, ahí se empieza a ver que no tiene límites y tiene un gran sentimiento de expansión esto es porque se empieza a adaptar, es importante definir cuando son trazos de izquierda a derecha pues pueden ser niños muy aprensivos, con sentimientos un tanto maternalistas, van a sufrir de abandono en sus primeros días de escuela, pueden ser niños muy dependientes.

Con el paso del tiempo nos vamos limitando de acuerdo a nuestras necesidades y expectativas, un poquito más grandes pueden empezar a definir el dibujo y a usar dos colores, ya están encontrando límites ya sabe hasta dónde puede llegar en cuestión de obediencia y evolución, ya valoran las figuras de la familia.

Si les pides que plasmen a su familia, en un niño que tiene un hogar funcional los dibuja todos en fila, definen perfectamente quién es la mamá, quién es el papá y quiénes los hermanos y en qué orden, en la gran mayoría los trazos que representan a la mamá son más grandes y puntiagudos es decir que tienen más presión esto es porque la figura materna tiene mayor imposición que la figura paterna, el dibujo del papá casi siempre está en segundo lugar de izquierda a derecha es decir que aunque es más pequeña la figura siempre está representando el resguardo de la familia, está dibujado bajo un contexto menor con menos presión porque es su escondite o resguardo, es con quien puede jugar, platicar y desobedecer pues se lo permite, es el consentidor cuando se siente en problemas relacionados con la desobediencia pero, cuando es un problema mayor el niño sabe que quien realmente lo puede salvar es la mamá.

Cuando van a empezar a dibujar o escribir no se recomienda usar ni pluma ni lápiz porque puede generar ciertos instintos de frustración; con el lápiz el niño tiene capacidad de borrar, esto adquiere inseguridad es decir no lo quiero lo quito, no me sale lo borro, automáticamente le estás dando oportunidad de que tome ciertos márgenes de indecisiones es decir se va a limitar, es recomendable empezar a trabajar con ellos con plumones pues no necesitan aplicar presión y van a tener suficiente expansión y que no utilicen hojas de cuadrícula ni de rayas pues automáticamente le estas poniendo límites es mejor trabajar en hojas en blanco pues si pudiera ser un niño muy sociable y extrovertido le estás limitando a ciertos cánones de comportamiento.

Todo lo que los niños dibujan en la parte superior del papel está relacionado con su imaginación y curiosidad, tiene deseos de descubrir cosas nuevas, la parte inferior de la hoja nos habla de las necesidades físicas y materiales, si dibuja o escribe del lado izquierdo le trae recuerdos constantes de su pequeño pasado mientras que en el lado derecho se refiere a un futuro, si el dibujo está en el centro de la hoja está representando su momento actual.

También es importante ver el tamaño de sus dibujos o letras, las muy grandes en diferencia a los adultos muestran seguridad, las pequeñas son niños que normalmente necesitan de poco espacio para expresarse, reflexivos y con falta de confianza.

Los trazos  del dibujo si son continuos es decir sin interrupciones denotan un espíritu dócil mientras que el borrado o cortado revela a un niño inseguro e impulsivo; la presión, cuando es normal es un niño entusiasta  con voluntad para hacer las cosas, cuanto más fuerte sea la presión es síntoma de agresividad, si la presión es mínima puede ser falta de voluntad o bien cansancio físico.

Cuando queremos saber su estado de ánimo en el momento de escribir es recomendable proporcionarles plumones o lápices de colores si eligen el rojo significa vida, es decir se siente activo con ganas de hacer cosas; el amarillo es de un niño curioso y con muchas ganas de vivir; el naranja es impaciente y necesita contacto social; el azul es de niños que viven con mucha paz muy tranquilos; el verde representa cierta madurez para su edad, sensible e intuitivo; el marrón se ve seguridad y planificación. Cuando los niños dibujan todo de un solo color teniendo la opción de combinar colores, denota pereza o falta de motivación.

En general lo antes explicado es lo más común, pero no debemos generalizar pues el dibujo y la letra de los niños de 18 meses y hasta 14 años abarca un gran mundo, en caso de que hubiese alguna inquietud se realiza un estudio grafológico individual.

Desde que nacemos estamos en constantes cambios y aprendizaje, algunas veces con instrucciones, otras tantas con logros y errores, pero cada una de estas vivencias nos forma para enfrentar los retos que vengan en el futuro dichas enseñanzas el cerebro las almacena y echa mano de ellas conforme se van necesitando en cada momento de nuestra vida…  ¡Espero hayan tenido un maravilloso Día de Reyes y les deseo un Feliz Año 2020!

Lydia Montes de Oca Jiménez, perito en grafología y grafoscopia.

Twitter: @lydimdeo

Instagram: @lydimdeo

Facebook:  Lydia De Oca

Deja un comentario