Sopa de letras – Manuel Bartlett, Director de la CFE

Ahora analizaremos la firma del Licenciado Manuel Bartlett Díaz actual Director de la CFE…

De firma grande es decir con impulso vital, sumamente activo, con una consciencia de sí mismo más o menos fuerte, con gran necesidad de afirmación, extrovertido hasta llegar al cinismo, en ocasiones emotivo e imaginativo, orgulloso, con gran necesidad de llamar la atención, según sus necesidades actúa con falta de realismo, poco fijado en los detalles, ésta escritura pertenece a menudo a políticos y en general a todas las personas que experimentan una gran necesidad de representación hasta llegar a sentir una compensación de un sentimiento de inferioridad.

Autoritario, no gusta de soltar fácilmente las cosas. Aferrado, siempre consigue lo que quiere, impulsivo, violento y exagerado; de descarga agresiva en ocasiones la manifiesta a través de palabras ofensivas o de actos impulsivos y reprochables todo esto como consecuencia de frustraciones de su pasado en el ámbito personal que nunca superó es decir la contrariedad a sus ideas y deseos vestido de inmediatez “quiero eso aquí y ahora” con exigencia neurótica de ser atendido de inmediato sin aceptar oposición, retardo o contrariedad, inadaptado, mismas situaciones las resuelve con agresividad verbal.

Tiende a utilizar su sentido del “humor” en un intento de liberar tensiones internas debido al rechazo anteriormente mencionado bloqueando tensiones en el inconsciente, pudiendo convertirse en angustia en extremo.

Según la ocasión y el entorno en que se encuentre puede llegar a encontrarse entre la gente tímida y modesta  en un contexto negativo su escritura denota avaricia, envidia, ganas de llevar a todo la contraria, maldad y en lo positivo indica firmeza, capacidad de concentrar fuerzas, con un gran  sentido de organización, le cuesta vivir sus contradicciones o se halla de algún modo descentrado debido a un conflicto entre lo ambicioso de sus aspiraciones y una capacidad insuficiente para llevarlas a la práctica, continuamente vive con el deseo de quedar bien con los demás, de aparentar, de comprar a los demás para hacerse respetar.

En la firma que se analiza el trazo puede ser accidental es decir que en ese momento demostraba contrariedad, inquietud o una fatiga pasajera; puede ser por el sentimiento de abandono que trae arrastrando o simplemente enfermedad o vejez.

Algunas veces de espíritu flexible, de comportamiento maleable y en ocasiones revela inconsistencia, nada sincero y de carácter huidizo, descarado y audaz; en otro trazo y confirmando lo anterior terquedad, obstinación, combativo vengativo, falta de flexibilidad hasta llegar a la dureza y en sentido positivo pudiera indicar voluntad, tenacidad, energía, coraje, buena capacidad de mando y sentido de la disciplina esto es aplicado dependiendo en el ambiente en que el escribiente se encuentre debido a su carácter voluble y manipulador para conseguir lo que quiere.

Puntilloso, que crea situaciones embarazosas, viven en la perturbación y la incoherencia y son sobre todo muy vanidosos, gusta de llamar la atención, conflictivo laboralmente cuando no logra sus objetivos, ostentoso, exhibicionista y en ocasiones de carácter jovial con un gran sentido estético; en ocasiones brusco, arrebatado, sobreexcitado de naturaleza fantasiosa, complicada y versátil, es decir puede cambiar de un momento a otro su personalidad pero siempre tratando de esconder su realidad.

Con una búsqueda de equilibrio, entre la intuición y la lógica, con gran necesidad de contacto, siempre va dirigido hacia una meta y  encauzamiento del interés hacia sí mismo, entre el deseo de acción y una cierta tendencia a la inactividad debido al cansancio que lo aqueja; sabe manejar con inteligencia el acelerador y el freno.

En la personalidad del Licenciado Bartlett podemos distinguir que asume el medio, es receptivo, instintivo, con disposición para gozar el mundo, de apertura a la vida hedonista, los apetitos del cuerpo rigen su comportamiento sin reglas de conducta exterior, sin embargo podemos deducir por su carácter voluble y su gran ambición pues en su firma podemos ver el número 3 que por su trazo indica una actitud arrogante y deseo de figurar, con gran ambición de poder y de superioridad, otorgando una importancia excesiva a los bienes materiales, egoísta con tendencia a guardar, atesorando sin importar a quien dañe.

Tengo una duda, quienes lo defienden  tendrán cierto temor y quieren que se aplique “lo que pasó en el SISEN se quede en el SISEN” apechugando todas las críticas al exonerarlo  o tendrán presente que a él en 1988 se le cayó el sistema y ahora quiso y también lo logró que en 2019 se calle el sistema… ¿Qué será?

Lydia Montes de Oca Jiménez, perito en grafología y grafoscopia.

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