Esta vez analizaremos la firma del Secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, Maestro Jesús Orta Martínez…
Firma de dimensión mediana en la que puede indicar buena adaptación con búsqueda de equilibrio entre los pares de opuestos, como también tendencia a la rutina, producto de una inteligencia y una sensibilidad poco desarrollada, de aspiraciones intelectuales, idealista, incuso espiritual, exaltado, de imaginación desordenada, todo esto acompañado por el orgullo y una buena autoestima.
En ocasiones tiene necesidad de iniciativa, entusiasmo, vivacidad, animación, se encuentra frecuentemente entre los optimistas entre la gente que ama la vida sin embargo algunas veces es excitado, arrebatado, desordenado, agitado hasta llegar al desequilibrio.
De pronto vive en un cuadro de armonía de originalidad, con buena lógica, con mezcla de dulzura y de firmeza, puede hallarse en escrituras inarmónicas y revelar entonces un carácter vacilante, dividida ente dos tendencias contradictorias, es decir un conflicto entre el ser y el deber ser.
Algunas veces sensible, intelectual, ingenioso, intuitivo, de ideas originales, falta de lógica en ocasiones de ideas deshilvanadas; con disminución de actividad, con tendencia al aislamiento y dificultades para la comunicación, es decir introvertido eventualmente un cierto egocentrismo, gusta de vivir aislado en lo que se refiere al plano intelectual.
Con cierta tendencia invasora hacia las personas ligeras y frívolas que carecen de juicio, de aspecto retorcido bajo sus aires de sencillez y de simplicidad; animado y de dinamismo mesurado, espontáneo de comportamiento franco y sin rodeos, flexible pero bien orientado, comunicativo, abierto siempre y cuando sea en su zona de confort.
Confirmando los trazos anteriores receptivo, instintivo, de disposición para gozar el mundo en el plano estético, de calor humano y apertura a la vida es decir hedonista, los apetitos del cuerpo rigen el comportamiento sin reglas de conducta exterior, en ocasiones presenta cierta pesadez, abandono, confusión espiritual, pudiendo ser impulsivo e iracundo.
Más agitado que activo, impulsivo, exagerado, imprudente e irreflexivo que huye de sí y depende en gran medida de las circunstancias exteriores; busca lograr sus objetivos aunque no siempre lo logra.
Con clara disposición a meterse en el terreno de los demás, con grandes dificultades para admitir autoridad, teniendo resistencia a las dificultades, tendiente a embrollar, enmascarar e intrigar para hacer las cosas más atrayentes, espectaculares o sensacionalistas esto es para que las personas que le piden cuentas no lo molesten más debido a su introversión le cuesta mucho trabajo convivir sobre todo si es tema de trabajo.
Algunas veces con indicios de lucha de la voluntad contra el desánimo, la fatiga o el cansancio, contratiempos, fracasos sufridos o alguna enfermedad, esta lucha puede pasar de la tenacidad a la obstinación.
Se motiva inconscientemente a sentir displacer, temor, inseguridad, culpabilidad o cualquier otro recuerdo emocional relacionado con vivencias antiguas o actuales de peligro para él, con actitudes de temor, timidez, desconfianza, le impiden se adapte con facilidad y espontaneidad a un entorno social, profesional y familiar normal.
Algunas veces reprime sus impulsos afectivos por lo que rechaza vínculos y toma una actitud postural de retirada o guarda su distancia debido a la acumulación de experiencias frustrantes que no quiere se vuelvan a repetir por lo que vive a la defensiva para evitar tener roces o enemistades que pudiera dañarle o causarle malestar.
Finalmente destaca su carácter tremendamente individualista, enemigo de las medias tintas, se consagra en cuerpo y alma a las tareas que emprende mismas que realiza con firmeza y empuje, es arrollador en el trabajo, de gran rapidez para tomar decisiones, muy exigente con los demás y consigo mismo; siendo el Doctor una persona introvertida y con graves problemas entre el ser y el deber ser, resulta inquietante que en la pasada movilización en la que hubo mil destrozos a comercios los ciudadanos nunca entendimos porque no hubo fuerza pública y de acuerdo a lo anteriormente descrito sobre su personalidad será que sólo cumplió instrucciones o estaría de acuerdo que la ausencia fue para no provocar confrontaciones? ¿Usted qué opina?
Lydia Montes de Oca Jiménez, perito en grafología y grafoscopia.
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