Después de dos años de intensos trabajos de reforzamiento estructural, la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México está a punto de reabrir algunas de sus estaciones que se encontraban cerradas debido al colapso parcial que sufrió en mayo de 2019, en el tramo elevado entre las estaciones Olivos y Nopalera, que dejó como saldo la trágica muerte de 26 personas.
El miércoles pasado, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció que para finales de junio espera que se puedan abrir cinco estaciones más, que corresponderían al tramo elevado de la Línea 12. Serían las primeras en reactivarse tras el desastre de hace dos años y abarcarían las estaciones Culhuacán, San Andrés Tomatlán, Lomas Estrella, Calle 11 y Periférico Oriente.
La mandataria capitalina precisó que se ha logrado un avance del 30% en la reparación del tramo elevado de la Línea 12, el cual cuenta con 260 claros entre columna y columna, cada uno con su propio proyecto ejecutivo y características específicas. Sheinbaum destacó que se están tomando todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los usuarios de la línea y que se está haciendo un seguimiento riguroso a los trabajos, con la participación de los mejores ingenieros estructuristas y laboratorios especializados.
No obstante, la jefa de gobierno enfatizó que lo más importante es que la Línea 12 sea una línea segura y confiable para los millones de personas que utilizan el transporte público en la Ciudad de México. Por esta razón, se han tomado todas las medidas necesarias para garantizar la calidad de las reparaciones y se seguirá trabajando en la reapertura del resto de las estaciones afectadas.
Cabe destacar que la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México fue inaugurada en noviembre de 2012 por el entonces jefe de gobierno y actual secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard. Desde su puesta en marcha, ha enfrentado diversos problemas técnicos y de mantenimiento, lo que ha llevado a la suspensión temporal de algunos tramos y estaciones en varias ocasiones. No obstante, el accidente de hace dos años representó uno de los mayores desafíos para la seguridad y la confiabilidad del sistema de transporte público de la ciudad, lo que ha llevado a una serie de investigaciones y reformas en materia de supervisión y mantenimiento de las líneas del Metro.