El embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, aseguró que el lazo económico de su país con México es el más importante del mundo y pronosticó, más optimista que nunca, un futuro compartido brillante, próspero y sustentable.
Al cumplir un año de su misión diplomática este 11 de septiembre, dijo que visitó los 32 estados de la República y ha visto el carácter y el trabajo bueno del pueblo mexicano, así como el respeto a los Estados Unidos.
“Compartimos la unión económica más importante en el mundo. La cual puede verse en la agricultura, la manufactura, el turismo y en los intercambios culturales y educativos, mientras el T-MEC nos brinda un marco comercial duradero”.
Destacó que América del Norte disfruta de vitalidad comercial, que integra sus cadenas de suministro y posicionan a la región como “la potencia económica mundial”, por ejemplo, entre el autotransporte y la electromovilidad que ha permitido aprovechar la oportunidad para transitar a la industria del futuro.
Y que “nuestros países también pueden ser una potencia económica en energías limpias y en el combate al cambio climático”.
Salazar dijo que la frontera México-Estados Unidos juega un rol crucial en la competitividad e integración y por eso, por primera vez en la historia, ambos gobiernos trabajan alineados para construir una frontera moderna, segura y eficiente. Y, para ello, su país invierte 3.4 mil millones de dólares en proyectos de infraestructura con proyectos fronterizos binacionales, como el de “los dos Laredos”, para unir a ambas naciones, mejorar la seguridad y cuidar el medio ambiente.
Al recordar su llegada a México en 2021, el diplomático dijo que “para alcanzar la visión de la unión económica del mundo que beneficia a todo el pueblo, se requiere seguir el trabajo compartido para la seguridad de las dos naciones” y que el Marco Bicentenario (que sustituyó a la Iniciativa Mérida) ha dado las bases para iniciar una nueva era de cooperación en seguridad con una responsabilidad compartida.
Por ello, destacó el respeto a la soberanía de México y el trabajo de Estados Unidos con los gobiernos federal y estatales y la sociedad civil “para ponerle un alto a las peligrosas organizaciones criminales que llevan corrupción y criminalidad a nuestros países. Falta mucho por hacer, incluyendo invertir mayores recursos para fortalecer la procuración y el sistema de justicia en todos los niveles” afirmó.
Además garantizó que su país “está comprometido a frenar el tráfico ilegal de armas para que no lleguen a nuestras comunidades” y prueba de ello es que cada año decomisan más de 600 mil armas, mientras el Congreso de los Estados Unidos aprobó en junio la Ley para Detener el Tráfico Ilegal de Armas de Fuego.
“Para detener a las organizaciones criminales que ponen en riesgo a nuestras sociedades, incrementamos los esfuerzos de coordinación con México contra el fentanilo, el tráfico de armas y el contrabando de personas. Cooperamos en materia de extradiciones para que los delincuentes enfrenten a la justicia en los dos países”, apuntó.
Asimismo, se refirió al tráfico de personas y aseguró que, como nunca, se trabaja con México para interrumpir sus redes multimillonarias porque “nadie debería de vivir el camino doloroso de quienes lucran con la dignidad de los más vulnerables”.
Sobre la migración irregular, Ken Salazar afirmó que se trata de un “reto compartido” crear un sistema migratorio ordenado, seguro y humano y que resulta “crucial que las personas tengan oportunidades en sus lugares de origen para que cumplan su derecho a permanecer en sus hogares y con quienes aman”.
El diplomático recordó que el próximo 12 de diciembre se celebrará el bicentenario entre los Estados Unidos y México, en tanto “reconocemos a los 32 estados y a la gente en cada uno de ellos. En todos los estados, me han mostrado la grandeza de México, de su gente, cultura y paisajes”.
“El lazo inquebrantable entre nuestros pueblos se ve en todos los rincones de nuestros países”, dijo el embajador al destacar que, de sus 331 millones de habitantes, Estados Unidos cuenta con más de 40 millones con raíces en México.
“Muchas familias mexicanas tienen algún familiar viviendo en Estados Unidos y por varias generaciones algunas tienen lazos en ambos lados de la frontera”, sostuvo.