Hace un par de semanas hablaba en este espacio de temas relacionados con el Síndrome de Burnout, el estrés laboral y las oportunidades que tienen las organizaciones que pretenden hacer pasar el trabajo bajo presión por un requisito laboral. Estos puntos, con los cuales de manera muy personal estoy absolutamente en contra (aun cuándo quizá llegue a padecerlos o hacerlos padecer), son, por fin un foco de atención a nivel gubernamental y materia de políticas públicas laborales a favor de la base trabajadora.
Así, desde el pasado 04 de septiembre de 2018 se creó la NOM-035-STPS-2018, misma que está en vigor desde el 24 de octubre pasado cuando se publicó en el DOF, su objetivo es “establecer los elementos para identificar, analizar y prevenir los factores de riesgo psicosocial, así como para promover un entorno organizacional favorable en los centros de trabajo” y se aplicará en todo el País. En sus dos transitorios, el decreto que crea esta Norma establece que “entrará en vigor al año siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Federación”, es decir el 24 de octubre de 2019, y algunas disposiciones específicas relacionadas con las obligaciones patronales, las medidas de prevención y las acciones de control, entrarán en vigor a los dos años siguientes, es decir, en octubre de 2020.
La NOM-035-STPS-2018, está alineada con obligaciones dispuestas en el Reglamento Federal de Seguridad y Salud en el Trabajo, además, distingue de acuerdo con la cantidad de trabajadores, las obligaciones para los centros de trabajo, por ejemplo, aquellos que cuentan con hasta quince trabajadores estarán exentos de aplicar evaluaciones; propone también métodos estandarizados (opcionales) para identificar los factores de riesgo psicosocial y evaluar el entorno organizacional, permitiendo el uso de métodos diferentes, es decir, las organizaciones podrán contratar especialistas externos para realizar las evaluaciones, diagnósticos y darle seguimiento.
Y, ¿en qué beneficia a las organizaciones y a los colaboradores cumplir una Norma Oficial Mexicana que parece tan complicada?, considerando que de acuerdo a un estudio global sobre estrés laboral, México aparece con un índice de 75%, por encima de China (73%) y hasta Estados Unidos (59%), y según datos del IMSS y la STPS un colaborador falta al trabajo hasta 25 días al año cuando sufre depresión, hasta 20 si sufre ataques de pánico o ansiedad y 14 en promedio si sufre estrés post traumático, desde luego, esto deriva en pérdidas productivas que se llegan a estimar en 16 mil millones de pesos anuales. El ausentismo laboral puede representar el 7.3% del costo de la nómina anual de las empresas mexicanas, lo que reduce un 23.8% la productividad general. Además, México es el octavo país con el índice de movilidad-rotación laboral más alto, con un rango del 17%.
Es decir, carecemos de una cultura de la salud mental laboral (y en general) y de ambientes laborales óptimos, por ello, la implementación de esta NOM será un primer paso para contar, en el mediano plazo, con colaboradores felices en espacios de trabajo sanos.
Esta norma establece, por fortuna, reglas claras, precisas y objetivas para que las organizaciones puedan tener medidas de prevención, medidas de control y puedan evaluar de manera interna o externa el entorno organizacional. Incluso, dispone que, aquellos centros de trabajo que cuenten con certificado de cumplimiento con la norma mexicana NMX-R-025-SCFI-2015 (en igualdad laboral y no discriminación) pueden dar por cumplidas algunas obligaciones de esta Norma.
Estas reglas, permitirán a muchas organizaciones contar con condiciones para que los empleadores, puedan mejorar el ambiente laboral, lo que por supuesto requiere de la participación de todos (colaboradores, socios, directivos) y esto, la participación, la integración laboral, la institucionalización de políticas son aspectos fundamentales para el desarrollo exitoso de una organización sin importar su giro y su tamaño, pues promueve la existencia de una cultura organizacional dinámica, incluyente y empática, algo que es muy necesario para el mercado laboral, y fortalece las buenas prácticas de todos los sectores productivos.
Los factores de riesgo que está NOM refiere son:
- Condiciones del ambiente laboral.
- Cargas de trabajo.
- Controles sobre el trabajo.
- Jornadas laborales y rotación de personal.
- Relación Trabajo-Familia.
- Violencia laboral (acoso, hostigamiento, malos tratos)
También prevé, además, condiciones específicas para su evaluación, registro, tratamiento, difusión y gestión. La norma, especifica de manera muy puntual la manera en la que la evaluación, deberá comprender: 1) un método, 2) una validación que incluya medidas de consistencia interna (confiabilidad y correlación) y de análisis factorial (ajuste absoluto, incremental y de parsimonia), y 3) un informe que además de ciertas características, deberá estar disponible para consulta de los trabajadores y realizarse, al menos, cada dos años.
Por otro lado, las obligaciones del patrón se enfocan en establecer “por escrito, implantar, mantener y difundir en el centro de trabajo una política de prevención de riesgos psicosociales”, generando para esto la estructura (e infraestructura), modificaciones y mejoras corporativas necesarias que contemplen la prevención de los factores de riesgo psicosocial, la violencia laboral y la promoción de un entorno organizacional favorable.
Básicamente, para cumplir con esta Norma las organizaciones deberán institucionalizar la aplicación de evaluaciones de clima organizacional, pruebas psicométricas, investigaciones socioeconómicas y planes de detección de necesidades de capacitación; para formalizar esto, solamente quedan los próximos 17 meses, ya sea que se gestione de manera externa o interna.
Por último, no cabe duda de que fomentar “trabajos felices” es esencial, no solo para elevar la productividad, sino para muchas otras cosas, por ejemplo, comenzar a “normalizar” prácticas como home office, vacaciones largas y pagadas, planes de vida-carrera, entre otras.
Como siempre, agradezco tu atención y no dudes en escribirme para saber más sobre esto o algún otro tema. mnunez@dirhmexico.com.mx
El autor es Socio Director Comercial de @dirhmx . Lobbyist. Consultor en gestión y administración de proyectos, DO y coaching corporativo para los sectores público y privado.
Twitter: @ManfredNS
Facebook: Manfred Nuñez-Solorio
Instagram: manfred.ns
LinkedIn: manfredns