Nuevo impuesto amenaza remesas de migrantes

Migrantes pagarían impuesto por enviar dinero

Las remesas, una fuente vital de ingresos para millones de familias en México, podrían enfrentar un cambio significativo. El Congreso de Estados Unidos, a través de su Cámara de Representantes controlada por el Partido Republicano, aprobó el pasado 22 de mayo una propuesta que incluye impuestos a remesas, medida que forma parte del proyecto denominado One Big Beautiful Bill. La legislación, impulsada por el expresidente Donald Trump, propone aplicar un impuesto del 3.5% a todos los envíos de dinero al extranjero realizados desde territorio estadounidense.

De recibir luz verde en el Senado, esta ley entraría en vigor en 2026. Según el contenido del proyecto, un migrante que envíe 1,000 dólares a México tendría que pagar 35 dólares adicionales. Se trata de una medida controversial, pues los montos enviados ya fueron previamente gravados con impuestos en Estados Unidos, lo que podría implicar una doble tributación.

La iniciativa, además, despertó preocupación entre autoridades mexicanas y organizaciones defensoras de migrantes. Cabe destacar que la propuesta inicial planteaba un impuesto del 5%, pero tras presiones diplomáticas y de legisladores fronterizos, el porcentaje bajó a 3.5%. Sin embargo, el objetivo central del plan fiscal de Trump permanece: aumentar el ingreso federal y financiar medidas como la seguridad fronteriza y el gasto militar.

Remesas enfrentan nueva carga fiscal si el Senado aprueba ley

El impacto para México sería considerable. En 2024, el país recibió 64,700 millones de dólares en remesas, equivalentes al 3.5% del Producto Interno Bruto. De estos fondos, 96.6% provinieron de Estados Unidos. Las entidades que más remesas reciben son Michoacán, Guanajuato, Jalisco, Ciudad de México y el Estado de México, las cuales dependen fuertemente de estos recursos para el consumo y la inversión local.

Además, 99.1% de los envíos se realizan mediante transferencias electrónicas, lo que garantiza transparencia y regulación. Por tanto, imponer un nuevo gravamen podría desalentar este tipo de operaciones formales y dar pie al crecimiento de métodos informales.

A nivel global, México se ubicó como el segundo mayor receptor de remesas en 2023, después de India. Las cifras del Banco Mundial indican que los flujos de dinero seguirán creciendo, pero esta propuesta podría frenar esa tendencia, en especial si otras naciones replican medidas similares.

Por el momento, todo depende del Senado de Estados Unidos, que votará la propuesta en septiembre. Mientras tanto, las comunidades migrantes y sus familias en México permanecen en incertidumbre ante lo que podría ser un nuevo obstáculo económico.