Las elecciones anticipadas en Alemania han arrojado como resultado un claro triunfo para la coalición conservadora CDU/CSU, que lidera con entre un 28,5% y un 29% de los votos, según los primeros sondeos. En segundo lugar se encuentra el partido populista AfD, con un notable aumento en su apoyo, alcanzando entre un 19,5% y un 20%. Este aumento es significativo en comparación con los comicios de 2021, reflejando el ascenso de la extrema derecha en el país.
La participación electoral fue elevada, con más del 83% de los votantes acudiendo a las urnas, la más alta desde la reunificación alemana en 1990. La coalición semáforo compuesta por el SPD, Los Verdes y el FDP, que había estado en el gobierno, colapsó en noviembre, lo que llevó a la convocatoria de estas elecciones anticipadas.
Los círculos económicos han expresado su urgencia por la formación de un gobierno estable que impulse reformas para reactivar la economía alemana. Friedrich Merz, líder de la CDU/CSU, ha indicado que la prioridad es formar un gobierno lo antes posible.
En un giro internacional, el presidente de EE. UU., Donald Trump, felicitó al bloque conservador por su victoria, comparando la situación alemana con la de Estados Unidos en cuanto al rechazo a políticas de inmigración y energía.
Con estos resultados, Alemania se enfrenta a un panorama político complejo, con la extrema derecha consolidándose como una fuerza política cada vez más relevante.