Avances en IA obligan a actualizar legislación mexicana en materia de protección de datos
Los avances en IA plantean nuevos retos para la legislación mexicana en protección de datos personales. Herramientas como ChatGPT y DeepSeek están transformando el panorama tecnológico. Tras la desaparición del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai), los legisladores mexicanos se enfrentan a una necesidad urgente. Ésta es la de actualizar las normativas relacionadas con el tratamiento de la información personal.
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La inteligencia artificial y su impacto en la privacidad
Se celebró en instalaciones del IMAI el Día Internacional de Protección de Datos Personales. En el evento, comisionados del instituto subrayaron la urgencia de adaptar las políticas públicas para regular los avances en Inteligencia Artificial. La comisionada del Inai, Josefina Román, destacó que tanto el sector privado como las instituciones del gobierno mexicano, a nivel federal, estatal y municipal, están utilizando tecnologías de Inteligencia Artificial. Dichas tecnologías procesan datos personales, muchos de los cuales pueden ser sensibles.
Román explicó que la Inteligencia Artificial no solo maneja grandes volúmenes de datos, sino que también tiene la capacidad de inferir información sensible, incluso cuando los datos están anonimizados. Esta capacidad pone en riesgo el derecho a la privacidad y a la autodeterminación informativa de los ciudadanos. Para abordar estos desafíos, la comisionada enfatizó la necesidad de contar con una autoridad reguladora que pueda garantizar un uso ético de la Inteligencia Artificial respetuoso de los derechos humanos.
La desaparición del INAI y la oportunidad para una nueva legislación
Con la extinción del Inai, se abre una ventana de oportunidad para reestructurar el marco normativo mexicano en cuanto a la protección de datos personales. Blanca Lilia Ibarra, otra comisionada del Inai, expresó que la desaparición del instituto debe dar paso a la creación de un nuevo modelo que proteja el derecho a la privacidad de los mexicanos en el contexto de la Inteligencia Artificial. Subrayó que este es un momento clave para actualizar la legislación y afrontar los retos tecnológicos que presenta la AGI.
Ibarra destacó la importancia de que exista armonía legislativa, técnica y jurídica, para facilitar la cooperación internacional en la protección de los datos personales. Esto es especialmente relevante, dado que la Inteligencia Artificial es una tecnología transfronteriza que requiere regulaciones globales para su uso adecuado.
El reto de garantizar altos estándares internacionales
Adrián Alcalá, comisionado presidente del Inai, señaló que el nuevo modelo de protección de datos personales debe ajustarse a los más altos estándares internacionales. Aunque México cuenta con leyes de protección de datos que regulan tanto al sector público como al privado, Alcalá subrayó que la AGI tiene un impacto global y, por lo tanto, su regulación depende de la cooperación y las normativas internacionales.
El comisionado también hizo un llamado a los legisladores mexicanos a permitir la participación de expertos, empresas y reguladores en el proceso de construcción de este nuevo modelo, a fin de asegurar una regulación adecuada y eficiente.
Los principios de protección de datos en la Inteligencia Artificial
Jacobo Esquenazi, estratega global de Privacidad de HP, explicó que la aplicación de los principios de protección de datos varía dependiendo de la etapa en que se encuentre el modelo de Inteligencia Artificial. Desde la creación del modelo hasta su interacción con los usuarios, los principios de protección de datos deben ser reconsiderados.
Esquenazi presentó los nueve principios de protección de datos más relevantes en el contexto de la AGI:
- Principio de licitud: Los datos deben ser tratados de manera legal, considerando las consecuencias del procesamiento y evitando resultados injustos o sesgados.
- Principio de limitación de la recolección de datos: El uso de grandes volúmenes de datos requiere reconsiderar cómo recolectarlos de manera proporcional.
- Principio de finalidad: Los datos deben ser recolectados con fines específicos, lo que requiere repensar su uso en modelos de Inteligencia Artificial generativa.
- Bases legales del procesamiento: En algunos casos, el consentimiento no es suficiente, por lo que otros marcos legales como el interés legítimo pueden ser necesarios.
- Principio de necesidad: Es necesario repensar cómo se recopilan datos, especialmente cuando no es posible contactar a los titulares para informarles sobre su uso.
- Derechos ARCO: El ejercicio de los derechos de acceso, rectificación, cancelación y oposición (ARCO) es complejo en la AGI y requiere nuevas soluciones, como filtros de resultados.
- Transparencia: Los desarrolladores de modelos deben declarar claramente las fuentes de los datos y las consecuencias de su uso.
- Responsabilidad demostrable: Es fundamental que las empresas demuestren que han realizado un análisis de riesgos y que se han implementado mitigaciones adecuadas.
- Flujo transfronterizo de datos: Los estándares internacionales deben permitir un flujo de datos controlado para evitar sesgos regionales en los modelos de AGI.
Conclusión: Un llamado a la acción
A medida que la Inteligencia Artificial continúa avanzando, la legislación mexicana debe adaptarse para garantizar que el uso de estas tecnologías sea ético, legal y respetuoso con los derechos humanos. Es esencial que los legisladores, expertos y ciudadanos trabajen de manera conjunta para crear un marco legal robusto que proteja los datos personales en un mundo cada vez más interconectado y digital. La actualización de la legislación en protección de datos es un paso crucial para enfrentar los desafíos que la AGI nos presenta en el presente y en el futuro.
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