El Rally Dakar, una de las competencias más exigentes del automovilismo mundial, ha sido escenario de grandes hazañas y sorpresas. Este año, el piloto español Carlos Sainz, vigente campeón en la categoría de coches, se vio obligado a abandonar el rally tras la segunda etapa, conocida como ’48h crono’, en las arenas de Arabia Saudita.
Un vuelco que marcó el destino
La participación de Sainz en el Dakar 2025 quedó comprometida tras un incidente ocurrido en la primera etapa. El madrileño, quien competía junto a su copiloto Lucas Cruz en un Ford Raptor, volcó durante la jornada del domingo. Aunque lograron continuar y completar la etapa, los daños sufridos por el vehículo fueron significativos, incluyendo una jaula de seguridad abollada, lo que imposibilitó la asistencia técnica adecuada para reparar los desperfectos.
Pese a las adversidades, Sainz y Cruz lograron llegar a la meta, aunque con una desventaja de una hora y media respecto al líder de la carrera. Sin embargo, las condiciones mecánicas de su coche no permitieron que la dupla continuara en la competencia, obligándolos a tomar la difícil decisión de retirarse.
Un legado imborrable en el Dakar
Carlos Sainz, conocido como “El Matador”, es una figura icónica en el automovilismo. Con cuatro victorias en el Rally Dakar (2010, 2018, 2020 y 2024), cada una con una marca diferente, ha dejado una huella profunda en la historia de esta competencia. Su última victoria, lograda en 2024 con un vehículo de propulsión eléctrica desarrollado por Audi, marcó un hito en la evolución tecnológica del Dakar.
Además, Sainz es bicampeón mundial de rallies (1990 y 1992), un logro que consolidó su reputación como uno de los mejores pilotos de su generación. Su capacidad para adaptarse a diferentes vehículos y terrenos ha sido una constante a lo largo de su carrera.
La despedida de un campeón
El anuncio de su retiro fue recibido con mensajes de apoyo por parte de la organización y la comunidad automovilística. En la plataforma X (anteriormente Twitter), la organización del Dakar despidió al piloto con un emotivo mensaje: “Hasta pronto, Rey Carlos”. Estas palabras reflejan el respeto y admiración que Sainz ha ganado en el mundo del automovilismo.
Aunque su participación en esta edición del Dakar haya llegado a un final prematuro, Carlos Sainz continúa siendo un referente en la competición, demostrando que incluso los campeones más experimentados enfrentan desafíos inesperados en una carrera tan impredecible como el Dakar.
